
Bruselas 30/10/2018 – La Fundación AZTI Tecnalia coordinará un nuevo proyecto europeo que busca reducir las posibles afectaciones ambientales de la actividad acuícola, a través del uso de la metodología de la Unión Europea, Huella Ambiental de Productos (PEF, por sus siglas en inglés). En esta iniciativa con cargo al programa LIFE, participa un consorcio formado por empresas de Grecia, Bélgica, y España.
Bajo el título LIFE AQUAPEF (Promote the effective implementation of the Product Environmental Footprint in the Mediterranean aquaculture sector), además de AZTI Tecnalia participan Forkys Aquacultures SA, Skironis Aquaculture SA y el Hellenic Centre for Marine Research, de Grecia; Katholieke Universiteit Leuven, de Bélgica; e INGENET - Ingeniería de Informática y Control S.L.U. y Cultivos Marinos de Guardamar, de España.
El proyecto cuenta con un presupuesto de 1,75 millones de euros, de los cuales, algo más de 1 millón de euros está financiado a través de fondos de la Unión Europea.
La Huella Ambiental de Producto (PEF, por sus siglas en inglés) es una metodología de la Comisión Europea que evalúa los efectos sobre el medio ambiente de un producto, la cual está basada en el Análisis del Ciclo de Vida (ACV), conforme a normas internacionales ISO de referencia, como son la UNE-EN ISO 14040 y la UNE-EN ISO 14044.
Como señalan desde AZTI, a través del Life AquaPEF, el proyecto buscará la implementación de la metodología en el sector acuícola mediterráneo. Esto implicará, como señalan, establecer un marco en el que todas las partes interesadas estén satisfechas, diseñar protocolos estandarizados de recopilación de datos para los inventarios de acuicultura y obtener conjuntos de datos representativos para las piscifactorías mediterráneas.
Estos se usarán para desarrollar protocolos para evaluar el desempeño ambiental, identificar estrategias de mejora con el mayor potencial de reducción de impacto ambiental y proponer categorías de impacto biológico o ecológico para complementar la evaluación PEF.
En el marco del proyecto se establecerán tres estudios en granjas de acuicultura con una capacidad productiva de 7.500 TM en su conjunto, para demostrar que es posible reducir el impacto ambiental general un 10 por ciento usando metodología PEF. Según señalan, con esto se reducirá el impacto equivalente a 7.700 TM de dióxido de carbono, 2.500 metros cúbicos de agua y 13.300 TM de desechos de alimentos. Para ello, se reutilizarán 200 TM de residuos biológicos.
El proyecto, además, también se utilizará para aumentar la conciencia social sobre los productos alimenticios sostenibles y transferir los resultados a toda la industria acuícola de la Unión Europea.
Con todo esto, Life AQUAPEF espera contribuir a la implementación de políticas de la UE, incluidas las directrices estratégicas para el desarrollo sostenible de la acuicultura, el plan de acción para la economía circular, la Directiva marco sobre la estrategia marina, el 7º Programa de acción medioambiental y el mercado único de productos ecológicos.
En la última parte del proyecto, se replicará las acciones en otras ocho granjas. Cinco de ellas de dorada y lubina en Grecia, España e Italia. Dos granjas de salmón Atlántico en Reino Unido e Irlanda, y una granja de rodaballo en el noroeste de España.
Finalmente, se celebrará un encuentro virtular (webinar) para compartir los resultados con otros grupos de trabajo de alimentos del PEF. Se espera que con este proyecto 5.000 consumidores tomen mayor conciencia de los alimentos sostenibles a través de la interacción con el proyecto.