
La Comisión Europea ha adoptado recientemente las nuevas directrices estratégicas para que la Unión Europea tenga una acuicultura más sostenible y competitiva. Del sector se espera que contribuya directamente al Pacto Verde Europeo y, especialmente, a la Estrategia “De la granja a la mesa”.
Para eso, se han diseñado directrices en estrecha consulta con los Estados miembros y las partes interesadas, representadas a través del Consejo Consultivo de Acuicultura.
Cuatro son los objetivos que se interrelacionan y que buscan dirigir el futuro desarrollo de la actividad: mejorar la resiliencia y la competitividad; participar en la transción ecológica; garantizar la aceptación social y la información al consumidor; y, finalmente, potenciar el conocimiento y la innovación.
Las directrices buscan también aumentar sustancialmente la acuicultura ecológica en la Unión Europea.
Además de elaborarse las directrices, que ahora deberán ser asumidas por los distintos Estados miembro para la elaboración de sus planes de desarrollo.
En ámbitos como el acceso al espacio y al agua, la salud humana y animal, el rendimiento medio ambiental, el cambio climático, el bienestar de los animales, el marco reglamentario y administrativo y la comunicación sobre la acuicultura de la Unión, se proponen actuaciones específicas. Concretamente, elaborar documentos de orientación detallados sobre buenas prácticas y un mecanismo de ayuda específico que sirva para ayudar a elaborar estos documentos, y también, a aplicar las buenas prácticas que se expondrán en ellos.