
Cada vez son más los investigadores que animan al mundo a cultivar más algas bajo el argumento de que estas son capaces de hacernos avanzar hacia un mundo con mayor seguridad alimentaria y con mayor capacidad de resiliencia para enfrentarnos al cambio climático.
Si la piscicultura es la manera más sostenible de producir proteína animal, todo indica que el cultivo de algas es el camino para producir vegetales de una manera más sostenible no solo de producir alimentos, también materiales de uso industrial.
A través de un estudio en el que han participado investigadores de la Universidad de Queensland los expertos han identificado a través del Modelo de Gestión Global de la Biosfera el potencial de cultivo de 34 especies de algas.
Según explica Scott Spillias, investigador de la Universidad de Queensland, las algas son una alternativa a la necesidad de expandir la agricultura para alimentar al mundo. Las algas, añade, tienen un gran potencial comercial y medioambiental como productoras de alimentos y son una materia prima interesante para incluir en piensos o fabricar plásticos, fibras, y energía.
En nuestro estudio hemos comprobado cómo la expansión del cultivo de algas puede reducir la demanda de vegetales terrestres y reducir las emisiones de gases efecto invernadero en más de 2,6 millones de toneladas equivalentes de CO2 al año, agua y fertilizantes.
Encontramos que existen millones de hectáreas en la zona económica exclusiva de los países con potencial para ser usadas para cultivar algas. En un escenario donde se sustituye el 10% de la dieta de la población mundial por productos de algas, se reduciría el uso de 110 millones de hectáreas de tierras de labor.
Por ejemplo, añaden, la zona económica exclusiva de Indonesia tiene 114 millones de hectáreas con potencial para cultivar algas. Australia también muestra gran potencial en términos de espacio y diversidad, con al menos 22 especies diferentes y un estimado de 75 millones de hectáreas de océano disponible.
Es importante, como señala Spillas, desarrollar una alguicultura que permita sustituir las necesidades de alimentos para alimentar el mundo pero sin trasladar los problemas actuales que tenemos en la agricultura al mar.
Referencia:
Scott Spillias, Hugo Valin, Miroslav Batka, Frank Sperling, Petr Havlík, David Leclère, Richard S Cottrell, Katherine R O’Brien & Eve McDonald-Madden (2023) Reducing global land-use pressures with seaweed farming. Nature Sustainability