CTAQUA inicia pruebas de cultivo en estero de la Bahía de Cádiz de tres macroalgas de interés

El Centro Tecnológico de Acuicultura (CTAQUA) ha desarrollado en los últimos años importantes avances en el cultivo de algas con potencial en la Bahía de Cádiz a través de diversos proyectos que no solo han mejorado el conocimiento de la especie, también técnicas de manejo y posibles usos en gastronomía y biotecnología.

Avanzando en este mejor conocimiento de estos vegetales marinos, van a implementar el cultivo de tres especies de macroalgas en esteros de la Bahía de Cádiz, específicamente en Marambay, un complejo de ocio, restauración y acuicultura en el municipio de Cádiz.

Como explica CTAQUA en su última newsletter, las algas seleccionadas para este cultivo son Chondracanthus teedei, Codium taylorii y Ulva ohnoi, seleccionadas por su potencial en diversas industrias y su gran variedad de aplicaciones en agricultura, alimentación animal y humana, cosmecéutica, farmacéutica, entre otras.

Esta acción, señalan, busca potenciar el sector emergente del cultivo de las macroalgas y está enmarcada en el proyecto europeo NOVAFOODIES. La experiencia servirá para complementar el trabajo que está realizando CTAQUA en la optimización de los cultivos de algas bajo condiciones controladas de laboratorio.

En la experiencia que se llevará a cabo en Marambay, el Centro Tecnológico empleará metodologías de siembra y cultivo más eficientes para conseguir un proceso rentable y poder extrapolarlo a una escala industrial. “Trabajaremos con técnicas de reproducción vegetativa con la fijación en cuerdas de protoplastos y células, así como con técnicas de reproducción sexual con la fijación de esporas” señala Manuel Macías, responsable del proyecto en CTAQUA.

“Con estas actividades de NOVAFOODIES se prevé proporcionar herramientas para favorecer el desarrollo de empresas relacionadas con el cultivo de algas, pudiendo sumarse actividades más tradicionales como la extracción de sal y la piscicultura extensiva, contribuyendo de este modo a la conservación de estos espacios de gran valor natural y cultural”, añade.

Conoce un poco más de las especies seleccionadas

Manuel Macías, responsable del proyecto en CTAQUA

Una de las especies seleccionadas para este proyecto es Chondracanthus teedei, un alga roja de gran interés en la industria de los ficocoloides como materia prima para la obtención de carragenatos. En gastronomía, C. teedei ha sido utilizada en el sur de Italia para la elaboración de platos tradicionales, al igual que en Asia donde se comercializa bajo el nombre de shinkin-nori.

En esta experiencia se utilizarán también dos algas verdes. La primera es Codium taylorii, conocida en el sur de España como “ramallo de mar” y en Galicia como “percebe del pobre”. Principalmente utilizada en gastronomía, ofrece sabores muy similares al de algunos crustáceos y tiene un alto contenido en calcio, magnesio y hierro, lo cual la convierte en un alimento saludable. También se han llevado a cabo investigaciones en las que se ha comprobado su potencial como bioconservante, su poder antifúngico y antivírico, entre otros.

Por último, la segunda alga verde es Ulva ohnoi, conocida como “lechuga de mar” debido a su aspecto. Tiene un gran potencial en nutrición debido a su alto contenido en vitaminas A, B, C, y E, minerales esenciales y fibras. También se ha estudiado su uso en alimentación animal, como biocombustible, en cosmecéutica y en farmacia.