La costa de Chile destaca por su gran productividad de algas, una industria en creciente desarrollo y de la que viven un importante número de personas dedicadas a la pesca artesanal y a la acuicultura de pequeña escala. Destacan, entre otras, las distintas especies de huiro (Lessonia spp) y el alga roja, pelillo (Agarophyton chilensis) antes Gracilaria chilensis, que se destina a la producción de agar-agar.
Aunque el pelillo es un alga presente en toda la costa del país, el mayor número de centros de cultivo, específicamente el 88% se localizan en el sur, en la región de Los Lagos, donde se obtiene el 77% de la producción nacional.
Tal es el interés por esta alga que la Universidad de Los Lagos y Fundación Chinquihue han firmado un convenio de colaboración cuyo objetivo es avanzar en investigación, innovación y emprendimiento en el área biotecnológica aplicada a las algas, particularmente en pelillo, obtenido de la pesca artesanal y la acuicultura de pequeña escala.
Entre otros aspectos se estudiará la factibilidad de usar la biomasa de pelillo para la fabricación de empaques utilizando esta alga como materia prima.
De esta forma, como señaló al respecto el rector de la Universidad de Los Lagos, Óscar Garrido, se busca dar valor en un recurso estratégico como es el pelillo y visualizar otras áreas de cooperación como son la acuicultura sustentable, el cambio climático y la biodiversidad. Esta alianza, como señaló, “nos va a permitir poder mejorar las condiciones de valor agregado al pelillo y obviamente condiciones más competitivas para quienes viven de este recurso que son los pescadores artesanales y las comunidades del sector costero”.
Fundación Chinquihue destaca por las líneas de innovación de esta especie de alga a base de agar-agar como caramelos y postres naturales, como una alternativa económicamente atractiva y sostenible para la comercialización.