Este año que comienza ha sido declarado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, como el “Año Internacional de la Pesca y la Acuicultura Artesanales” (AIPAA 2022).
Proclamado a iniciativa de Perú en 2017 bajo el lema “Pequeña escala, gran valor”, se busca sensibilizar a la opinión pública y a los gobiernos sobre la importancia de generar políticas públicas diferenciadas y programas para promover la pesca y la acuicultura de manera sostenible, con especial atención a las zonas rurales más vulnerables.
Aumentar la sensibilización y la comprensión mundial de la contribución de estos sectores artesanales al desarrollo sostenible, la seguridad alimentaria, la nutrición y la erradicación de la pobreza con el uso sostenible de los recursos naturales son los objetivos marcados en la iniciativa.
Como señaló al respecto el director general de la FAO, QU Donyu, la actividad artesanal de la pesca y la acuicultura interpreta a la perfección los objetivos de “producción mejor, nutrición mejor, ambiente mejor, y vida mejor para todos”. Los pequeños pescadores y acuicultores representan el mayor aporte de pescado y marisco que se consume. Cerca del 80% de la producción acuícola mundial procede de países en vías de desarrollo con un número de productores artesanales mucho más elevados respecto a aquellos que desarrollan la acuicultura a media y gran escala.
El año internacional de la pesca y la acuicultura artesanal busca también promover el diálogo y la colaboración entre pescadores, piscicultores y trabajadores de la pesca artesanal a pequeña escala, los gobiernos y otros actores clave a lo largo de la cadena de valor. Por eso, durante 2022 habrá una completa agenda de actos que buscarán poner en valor esta actividad.