
Sevilla 2/11/2020 – La Consejería andaluza de Agricultura y Pesca ya se encuentra trabajando en la elaboración de una propuesta para el próximo periodo de ayudas del Fondo Europeo Marítimo de la Pesca y la Acuicultura (FEMPA 2021-2027) que estará dotado con un presupuesto próximo a los 200 millones de euros.
Hasta 2023 la comunidad andaluza continuará con la ejecución del actual tramo de ayudas. Como ha explicado la consejera del ramo, Carmen Crespo, los principales ejes de programación de los fondos para Andalucía se orientan a la “creación y el fomento del empleo en las zonas costeras que dependen de la pesca”, a la competitividad de las empresas “en un marco de seguridad y capacidad de planificación de su actividad económica” y a la sostenibilidad económica y social de las actividades pesqueras, “teniendo siempre en cuenta la necesidad de preservar el buen estado de conservación de los caladeros para que proporcionen el rendimiento máximo de forma sostenible”.
Entre las acciones que se incluyen en el programa de ayudas financiadas a través del FEMPA se encuentra el respaldo económico a medidas sociales dirigidas a hacer más atractiva la pesca para la sociedad en general y para los jóvenes y las mujeres en particular; así como la puesta a disposición de los profesionales del sector de instrumentos financieros que contribuyan a paliar las consecuencias provocadas, por ejemplo, por adversidades climáticas, ambientales y de salud pública.
Asimismo, el Gobierno andaluz incluye en su programación ayudas para fomentar el desarrollo de la acuicultura marina y continental, la diversificación de las actividades tradicionales de pesca y los proyectos vinculados a la economía azul en las zonas costeras.
Por otro lado, también se contemplan actuaciones relativas a las infraestructuras, las instalaciones y el equipamiento de los puertos pesqueros con el fin de mejorar las condiciones de trabajo y seguridad y avanzar en eficiencia energética y en cuestiones medioambientales. En cuanto a este último ámbito, se apuesta por seguir dando pasos en la recogida, gestión y tratamiento de las basuras marinas, en el control de las actividades que se desarrollan en los puertos, en la recepción, procesado y salida de los descartes. En este mismo sentido se encaminarían también ayudas ligadas a la contribución de los pescadores y mariscadores a la protección del medio ambiente y la mitigación del cambio climático a través, por ejemplo, de la recogida de basuras marinas y el control y la erradicación de especies invasoras.
Además, desde Andalucía se propone que estos fondos europeos fomenten la pesca turismo y la diversificación de las actividades pesqueras, impulsen nuevos establecimientos y servicios para las empresas acuícolas y respalden también la puesta en marcha de instalaciones de depuración, expedición y comercialización de especies pesqueras, en general, especialmente de moluscos bivalvos y algas.
En la propuesta elaborada por la Consejería de Pesca andaluza se incluyen también ayudas a inversiones a bordo de los buques y empresas almadraberas dirigidas a modernizar su equipamiento, a la adquisición de motores más eficientes, a la incorporación y adaptación del barco para el uso de energías renovables o a la mejora de la seguridad y las condiciones sanitarias y de trabajo a bordo mediante la adquisición de diverso material de utilidad a tal efecto (EPIs, chalecos y dispositivos individuales, salvavidas, balsas o sistemas contraincendios y de comunicación, entre otros).
Además, también se contempla la concesión de incentivos que, entre otros fines, faciliten la sustitución y mejoras en las artes de pesca para otras más selectivas y más seguras para los trabajadores, que contribuyan a la reducción de la pesca no deseada, que conlleven la incorporación de dispositivos para la búsqueda y recuperación de artes perdidos o que tengan como objetivo la instalación de sistemas de localización del buque.
En cuanto a la industria, la propuesta de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible contempla también subvenciones a inversiones productivas relativas a comercialización y transformación de productos pesqueros que contribuyan, entre otros objetivos, a la mejora de las condiciones de seguridad y de trabajo en las empresas, a la eficiencia energética y a la generación de valor añadido de estos alimentos. Algunos ejemplos de estas actuaciones serían aquellas medidas encaminadas a avanzar en la innovación de los procesos productivos o en nuevos productos, presentaciones y formas de envasado.
Desde la Junta de Andalucía se apuesta también por prestar apoyo a la creación de nuevas Organizaciones de Productores Pesqueros (OPP) y a los planes de producción y comercialización que se lleven a cabo desde este tipo de entidades, así como a las asociaciones del sector que promuevan planes de desarrollo, modernización y promoción de la pesca.
La Consejería propone también apoyar la nueva estrategia de los Grupos de Acción Locales del Sector Pesquero (GALP) que promuevan el desarrollo local participativo para la creación de empleo y contribuyan a mejorar la calidad de vida en todas las zonas de influencia pesquera de Andalucía.