La Cámara Nacional de Acuacultura de Ecuador ha denunciado recientemente la situación crítica en la que se encuentran las empresas del sector camaronero a causa de la “falta de planificación” en los racionamientos eléctricos y la “falta de la comunicación” oportuna por parte de las autoridades.
Estos cortes de suministro eléctrico se están produciendo por una combinación de factores climáticos como la sequía y baja generación hidroeléctrica, técnicos y estructurales en el sector energético del país. Las provincias más afectadas son Guayas, Manabí, Los Ríos, El Oro y Pichincha.
Tal y como denuncian desde la Cámara Nacional, las pérdidas económicas superan los 5 millones de dólares diarios. De continuar esta situación, añaden, estas pérdidas podrían acumularse en decenas de millones en pocas semanas, afectando tanto las exportaciones como la producción interna de insumos, y poniendo en peligro la sostenibilidad del sector, que en 2023 se situó como el mayor productor a nivel mundial con 5.800 millones de dólares en valor y 1,3 millones de toneladas, y se encuentra entre una de las principales industrias del país.
Uno de los pilares del proceso productivo es la fabricación de piensos para los langostinos. Las fábricas requieren de tiempos específicos para el encendido y operación de los equipos, lo que resulta imposible sin un suministro eléctrico estable. De igual forma, advierten, las empacadoras de camarón se ven impedidas de planificar la recepción, procesamiento, empaque y almacenamiento del producto, lo cual es vital para cumplir con los compromisos de exportación.
Además, estas empacadoras necesitan congelar el camarón a -18 °C, proceso que exige un consumo considerable de energía. La falta de energía amenaza la preservación del camarón, comprometiendo tanto la calidad del producto como el cumplimiento de los estrictos estándares internacionales de seguridad alimentaria.
Las fincas camaroneras también se ven gravemente afectadas por la falta de electricidad, ya que el bombeo de agua para mantener los niveles adecuados de oxígeno en los tanques es esencial para la supervivencia de los crustáceos.
Esta situación ha llevado a la Cámara Nacional de Acuacultura ha solicitarle al Gobierno Nacional que implemente un enfoque diferenciado en el racionamiento eléctrico para zonas industriales, como los cantones Durán y Yaguachi en la provincia del Guayas, donde la demanda industrial es significativamente mayor que la residencial.
Entre sus propuestas se incluye limitar las interrupciones de energía para el sector industrial a una sola vez al día y garantizar anuncios previos sobre los cortes, permitiendo una mejor planificación.
El gremio también ha expresado su disposición para colaborar con las autoridades en soluciones conjuntas. La iniciativa del Gobierno de involucrar al sector privado en la generación eléctrica durante la crisis ha sido bien recibida, pero se necesita claridad en cuanto a la implementación de estas medidas, incluyendo la instalación de medidores y la emisión de notas de crédito para cubrir los costos operativos de los generadores privados.
El sector camaronero, vital para la economía ecuatoriana, hace un llamado urgente a las autoridades para mejorar el flujo de información y establecer una planificación más precisa en los cortes de energía. De lo contrario, la industria enfrenta un futuro incierto que afectaría no solo la producción, sino también el sustento de miles de familias que dependen de esta actividad.