
Bostón (EEUU) 13/03/2018 - Ejecutivos de importantes empresas productoras de langostinos (camarones) de acuicultura en Ecuador han lanzado oficialmente la iniciativa “Sustainable Shrimp Partnership” o SSP.
El lanzamiento se ha producido en el marco de la Feria Boston Seafood, en Estados Unidos, y tiene por propósito el impulso de los valores de la industria a través el cumplimiento de altos estándares de calidad, con cero uso de antibióticos y completamente trazables.
Las empresas adheridas a SSP son Industrias Pesquera Santa Priscila; Omarsa; Corporación Lanec; Naturisa; Camaronera Rio Nilo; Salmos; Lebama; Agromarina; y Produmar.
La iniciativa cuenta con un consejo asesor integrado por Fondo Mundial para la Vida Silvestre (WWF), la Iniciativa de Comercio Sostenible (IDH) y la Certificación Aquaculture Stewardship Council (ASC).
El compromiso alcanza hasta estándares sociales y ambientales y la promoción de un producto de calidad a través de mayor colaboración y transparencia.
Al respecto de este lanzamiento, el presidente ejecutivo de la Cámara de Acuacultura de Ecuador, José Antonio Camposano ha indicado que hasta ahora el langostino está considerado un producto básico, “donde a menudo el precio ha sido más importante que la calidad”. “Pero hay consumidores que desean más opciones. A aquellos consumidores que se preocupan por lo que comen y cómo se ha producido, es hora de que se les ofrezca una opción de camarón cultivado que cumpla con los más altos estándares. Camarones cultivados por productores comprometidos con la excelencia, para consumidores que exigen la máxima calidad”.
Por su parte, Rodrigo Laniado, miembro fundador de Sustainable Shrimp Partnership expresó este sello permitirá diferenciar nuestro camarón. “Aprendimos hace unos años que el medio ambiente es el mejor amigo de los camaroneros y hoy estamos produciendo más camarones y somos cada vez más sostenibles”.
Durante el lanzamiento de SSP se presentaron los parámetros que deben cumplir las empresas que deseen ser miembros de esta iniciativa: el producto debe cumplir con la certificación ASC, no debe emplear antibióticos en toda la cadena de producción; tiene que ser un producto completamente trazable y con el mínimo impacto ambiental, a través de la evaluación de la calidad del agua.