
El ayuntamiento de Calpe ha anunciado oficialmente que ha presentado un recurso contra la ampliación de la piscifactoría que se planea poner en marcha en este municipio alicantino después que la Dirección General de Agricultura y Pesca desestimara el recurso de alzada que el consistorio interpuso.
Esta decisión ya fue ratificada el pasado mes de noviembre en el pleno del ayuntamiento con los votos favorables del Partido Popular, Ciudadanos y Defendamos Calpe. Los argumentos para oponerse a la puesta en marcha de esta piscifactoría son el impacto paisajístico de esta instalación en el litoral, y un estudio sobre los efectos medioambientales en las corrientes marinas.
Según el consistorio, la supervisión de la documentación presentada por la empresa para obtener la autorización de ampliación está “falta de rigor” y “dejadez” y no se ha respetado “el principio de precaución” que recoge el Tratado de Funciones de la Unión Europea, y que implica la adopción de medidas preventivas para reducir un posible daño ambiental pese a que se desconozca la probabilidad precisa de que este ocurra.
El recurso, pese a que parece que no tiene muchas posibilidades de prosperar, tal y como reconoció en su momento la alcaldesa de Calpe, Ana Sala, llega en un momento en el que se esperan varias convocatorias electorales en España, entre otras, las elecciones de los representantes municipales.