Como respuesta a la presión que existe sobre las tierras de labranza y el consumo de agua dulce por los efectos del cambio climático, cada vez surge con más fuerza la idea de cultivar el mar con algas como alimento.
Con este propósito, el Centro Tecnológico de Acuicultura de CTAQUA, está evaluando el cultivo de Codium spp, un alga verde de las que hay distribuidas más de 50 especies por todo el mundo, incluida la Bahía de Cádiz, con gran versatilidad para su uso culinario y que se consume en muchos países en crudo, en ensaladas, ceviches y aliños, o en sopas, guisos y arroces por su cremosidad y fuerte sabor marino.
En concreto, lo que está haciendo CTAQUA con esta alga es evaluarla como alternativa para la explotación de PYMES en Andalucía en el marco del proyecto europeo ACCESS2SEA, y proveer de fuente de ingresos complementaria a los esteros de la Bahía de Cádiz, que se sume a las actividades de extracción de sal o cría extensiva de especies piscícolas, contribuyendo, además, “a la conservación de estos espacios de gran valor natural y cultural”.
Como señala al respecto Erik Malta, jefe del departamento de investigación aplicada e innovación de CTAQUA, y especialista en ecología de macroalgas, “hemos seleccionado Codium spp por sus propiedades y versatilidad, ya que su ámbito de aplicación abarca no sólo la alimentación humana, sino que también es una fuente de componentes para la alimentación animal, la cosmética y la cosmecéutica”. Esta alga, como señala Malta, presenta un amplio abanico de compuestos bioactivos de alto valor nutricional, como los ácidos grasos poliinsaturados, en particular, el Omega-3 y Omega-6”.
El equipo de CTAQUA pondrá en marcha el ensayo de siembra de Codium spp basándose en estudios previos. Como detalla María Galindo, responsable del proyecto ACCESS2SEA en CTAQUA, el alga ha sido cosechada del Parque Natural de la Bahía de Cádiz y, aprovechando la estructura celular, extrajeron los ápices de los talos vegetativos que posee más influencia de crecimiento que se picaron y sembraron en placas de Petri que contenía el “hilo de siembra” que son, “finos trozos de cuerda” especialmente indicados para esta acción.
Posteriormente, añaden, estas cuerdas con los esquejes se trasladaron a un tanque de cultivo donde, cuatro semanas después, se observaron con el microscopio nuevas vesículas (utrículos) y filamentos”, detalla
El procedimiento de cultivo en vivero se está llevando a cabo en las instalaciones de CTAQUA, mientras que los siguientes pasos en el crecimiento vegetativo se realizarán en los esteros de la empresa colaboradora, Tsiane Acuicultura Multitrófica S.L.U.
Una vez sembrado en esteros, realizaremos un seguimiento del crecimiento vegetativo. Previsiblemente, en junio o julio de este año, cuando tengan un tamaño suficientemente grande, se cosechará y llevaremos a cabo un análisis de su composición bioquímica y de sus principales propiedades, como, por ejemplo, su actividad antioxidante, concluye María Galindo.
Este ensayo, añaden desde CTAQUA, se está realizando en colaboración con otro proyecto europeo, Biogears, liderado por AZTI.
Este proyecto es financiado por el Programa Interreg Zona Atlántica a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional. Liderado por CEEI Bahía de Cádiz, Access2Sea cuenta con socios de Portugal, Francia, Irlanda, Reino Unido y España. CTAQUA participa en todos los paquetes de trabajo y lidera Desarrollo de proyectos piloto.