Un nuevo estudio de investigadores españoles y portugueses ha arrojado luz sobre los efectos del nado en la salud oxidativa de la dorada (Sparus aurata), una importante especie de acuicultura en el Mediterráneo.
En su investigación los científicos analizaron cómo las diferentes condiciones de nado afectan la actividad antioxidante de los peces. La conclusión de este estudio subraya la importancia de proporcionar condiciones de nado adecuadas en la producción de doradas, ya que el ejercicio “modula el estatus antioxidante en diferentes órganos”. Al entender mejor los efectos, señalan los autores del trabajo, los acuicultores pueden optimizar las condiciones en las granjas acuícolas para asegurar la salud y bienestar de los peces y, por tanto, la mejor calidad del pescado.
Mejorar el estrés oxidativo de los peces también permite reducir el riesgo a enfermedades. Además, y basándose en la comprensión de las necesidades antioxidante de los peces, se podrían diseñar dietas específicas que complementen estas necesidades.
Como describen en un artículo publicado en la revista científica Biochemistry and Molecular Biology, la investigación se centró en cómo distintas velocidades y patrones de nado, desde constantes hasta oscilantes, afectan las enzimas relacionadas con el estrés oxidativo en el hígado y en los músculos rojo y blanco del pez.
El estudio fue llevado a cabo en las instalaciones del CIIMAR de la Universidad de Oporto. Para el estudio utilizaron doradas proporcionadas por la Estación Piloto de Piscicultura de Olhão pertenecientes al IPMA.
Para el experimento se establecieron cinco grupos, cada uno con condiciones de nado específicas que varían desde velocidades bajas hasta altas, y un grupo control que no realizó ejercicio.
Los resultados mostraron que todos los regímenes de nado resultaron en una disminución de la actividad de ciertas enzimas antioxidantes en el hígado en comparación con el grupo control. Sin embargo, en condiciones de nado constante, se observó un aumento en la proporción de glutatión reducido/glutatión oxidado, un indicador clave del estatus antioxidante. Es decir, a mayor presencia de esta molécula mayor capacidad antioxidante, lo cual es una señal positiva en términos de salud celular y capacidad para “lidiar” con posibles desafíos oxidativos.
Además, comprobaron que el nado no solo afecta al hígado. Dependiendo de las condiciones, la actividad antioxidante en los músculos rojo y blanco también se vio modulada. Por ejemplo, las condiciones de nado oscilante de alta velocidad aumentaron la peroxidación lipídica y la actividad de ciertas enzimas en el músculo rojo.
Estos hallazgos subrayan la importancia de proporcionar condiciones de nado adecuadas en la producción de doradas, ya que el ejercicio modula el estatus antioxidante en diferentes órganos.