Un estudio de la marca colectiva de APROMAR “Crianza Mares y Ríos de España” asegura que el 87 por ciento de los consumidores en España prefiere un pescado de origen nacional, y estaría dispuesto a pagar hasta un 10 por ciento más por un pescado certificado como español.
Este sello busca diferenciar los pescados de acuicultura de producción española para dar mayor garantía a los consumidores en un momento en el que la caída del consumo de pescados frescos se está acentuando.
Para reforzar esta idea, la pasada semana se celebró un desayuno informativo organizado por Europa Press bajo el título “La importancia del origen España como driver de compra” en el que participaron el gerente de APROMAR, Javier Ojeda; la directora general de FEDEPESCA, Luisa Álvarez; la responsable de Seguridad Alimentaria y Medio Ambiente de ACES (Asociación de Cadenas españolas de Supermercados), María Segura, y el portavoz de OCU, Enrique García.
Esta marca colectiva, como explicó Javier Ojeda durante su intervención, permite a los consumidores “reconocer de una manera clara” las lubinas, las doradas, y las corvinas, así como la trucha, el esturión y el caviar producidos en España. Además, esta marca, añadió Ojeda, aporta “garantía de seguridad, calidad, frescura, origen”.
Los pescados de acuicultura española, como explicó Javier Ojeda, son también garantía de sostenibilidad y bienestar animal y permite establecer un precio moderado y más o menos estable, razonable y asequible durante todo el año, “un factor que es importante también en la decisión de compra”. Además, ha destacado que la acuicultura española crea empleo estable en muchos lugares de la España vaciada y en las zonas costeras.
Lamentablemente, como explicó el gerente de APROMAR, solo el 18 por ciento de los consumidores “sabe reconocer fácilmente” en la pescadería los productos españoles. La parte positiva, como explicó Ojeda, es que hay “margen de mejora”.
Por su parte, María Luisa Álvarez, ha destacado la importancia que tiene para las pescaderías tradicionales que el consumidor "pueda identificar la marca Europa y especialmente la marca España". "Para nosotros eso significa garantías de calidad, de desarrollo rural, y todo lo que significa vivir y producir en uno de los entornos más legislados del mundo".
En la misma línea se ha posicionado María Segura, quien ha expresado el apoyo a iniciativas como el sello Crianza de Mares y Ríos. "Es una garantía, pero no solo en el sector de la pesca y llevamos 10 años colaborando con la asociación Origen España porque las empresas quieren apoyar ese origen España, apoyar la calidad diferenciada", ha añadido.
El portavoz de OCU, Enrique García ha apelado en su intervención por la necesidad de que los sellos de calidad aporten "un valor añadido", porque "todo lo que se vende cumple la normativa europea y un sello que se limite a cumplir la norma no tiene valor". Asimismo, ha reclamado una "normativa clara y transparente" porque, en su opinión, la "autorregulación fracasa sistemáticamente".
García ha admitido que el marco europeo tiene "los estándares más altos del mundo en seguridad alimentaria", pero ha reiterado que "eso se consigue con la regulación" y ha apostado por la aprobación de reglamentos.
Sin embargo, Javier Ojeda considera que "más legislación no quiere decir más información" porque "no van emparejados. "Producir comida hoy en la Unión Europea es complicadísimo, la legislación tiene que ser ágil y hay, sin duda, que mejorarla, pero la parte productiva es muy importante". Ha hecho hincapié, además, en "recuperar la confianza del consumidor que piensa que los productores les están envenenando".
Luisa Álvarez ha compartido la importancia de un marco regulatorio adecuado, aunque ha afirmado que al sector de las pescaderías no les gusta "demasiado la excesiva burocracia". "Estamos hablando de un producto muy perecedero y la cadena pesquera española es líder de principio a fin, no existe ninguna red de pescaderías como la nuestra, somos los mejores de Europa, así que vamos a creérnoslo", ha añadido.
Y, para María Segura uno de los retos de las cadenas de supermercados es conciliar toda la normativa, tanto la sanitaria como la medioambiental y de sostenibilidad del sector para lo que ha transmitido su apoyo a "todos los sellos de calidad".