Las principales organizaciones de la acuicultura europea se reunieron ayer en Bruselas con el comisario europeo responsable de Pesca y Océanos, incluida la acuicultura, Costas Kadis, para solicitar un impulso político decidido que permita revertir décadas de estancamiento e integrar plenamente a la acuicultura en las estrategias alimentarias y de economía azul de la Unión Europea.
La Asociación Europea de Productores de Moluscos (EMPA), la Federación Europea de Productores Acuícolas (FEAP) y la Plataforma Europea de Tecnología e Innovación en Acuicultura (EATIP) —que representan en conjunto a todo el sector acuícola de la UE— participaron en un encuentro en formato reducido con el comisario. La reunión abordó los retos urgentes del sector y su contribución a la Visión para la Acuicultura hacia 2040, así como a la futura Estrategia de Investigación e Innovación Oceánica.
Las organizaciones alertaron de que, mientras la producción acuícola global continúa creciendo, la europea lleva más de 25 años estancada o en retroceso. Subrayaron que esta situación no se debe a falta de emprendimiento o innovación, sino a “una burocracia excesiva, procesos administrativos gravosos, iniciativas fragmentadas, un reconocimiento insuficiente en la planificación espacial y marcos políticos que generan consultas, pero ofrecen pocos resultados”. Como consecuencia, añadieron, la fuerte demanda europea de alimentos acuáticos se cubre cada vez más con importaciones procedentes de países con políticas acuícolas más coherentes.
Los representantes sectoriales pidieron a Kadis que ejerza un liderazgo político firme dentro de la Comisión Europea y en los Estados miembros, garantizando la integración de la acuicultura en la política alimentaria, las estrategias de competitividad, las prioridades de investigación y la legislación ambiental.
El comisario Kadis “acogió con satisfacción el intercambio” y reiteró su compromiso de situar a la acuicultura en un lugar destacado de la agenda alimentaria y de economía azul de la UE. “Aquaculture is a top priority in my portfolio, both for food security and for competitiveness in coastal and river areas”, afirmó. “Promoting aquaculture is also key to reducing our dependency on imported seafood. Demand-driven research must play a central role in future EU research programmes.”
Las organizaciones valoraron positivamente este mensaje, pero insistieron en la necesidad de transformar la ambición política en avances concretos, con “reality-checks regulares a nivel de explotación” para asegurar que las políticas responden a las necesidades operativas.
Addy Risseeuw, presidente de EMPA, destacó la necesidad de una política específica de la UE que reconozca la acuicultura como un sector estratégico dentro del sistema alimentario europeo —esencial para la seguridad alimentaria, la resiliencia climática y el desarrollo costero—. Reclamó objetivos de crecimiento claros y cuantitativos, incluido un aumento del 25% en la producción acuícola europea para 2040, apoyado en un mejor acceso al espacio, normas más ágiles y un equilibrio entre objetivos ambientales y productivos mediante un enfoque ascendente.
El secretario general de FEAP, Javier Ojeda, advirtió de que “sin objetivos de producción claros, no hay responsabilidad y no hay progreso”. Subrayó que la legislación ambiental europea debe ser plenamente compatible con la producción alimentaria sostenible: la protección ambiental es esencial, pero los marcos regulatorios deben permitir también el crecimiento responsable, la innovación y la inversión.
Por su parte, Lorenzo Gennari, presidente de EATIP, señaló la necesidad de coherencia en la investigación e innovación en acuicultura dentro de la nueva Estrategia de Investigación e Innovación Oceánica y del próximo Programa Marco Horizonte Europa. Afirmó que la I+D acuícola ha estado “infradotada” durante demasiado tiempo, especialmente en lo relativo a la difusión y aplicación de los resultados. Recordó que muchas acciones de investigación resultan inaccesibles para micro y pequeñas empresas, con asociaciones de productores preparadas para asumir un papel mayor. Reclamó una investigación “impact focussed and aligned to economic needs and market demands” y liderazgo político para armonizar prioridades e inversiones entre los distintos servicios de la Comisión.
Durante el encuentro también se revisaron los principales expedientes políticos que marcarán el futuro del sector, entre ellos el Pacto Europeo por los Océanos, la próxima Visión UE para la Pesca y la Acuicultura 2040, el Marco Financiero Plurianual y la evaluación y posible revisión de la Política Pesquera Común.
Las organizaciones calificaron la reunión de constructiva y alentadora, pero subrayaron que ahora lo fundamental es la aplicación. Afirmaron que la UE debe convertir las buenas intenciones —tanto de la Comisión como de los Estados miembros— en “resultados medibles” que permitan un sector acuícola próspero, competitivo y sostenible. La coalición reiteró su disposición a acompañar activamente esta fase de implementación y acogió la invitación del comisario para celebrar reuniones periódicas de seguimiento.

