
San Carlos de la Rápita (Tarragona) 3/04/2019 – Investigadores del IRTA han descubierto en la Bahía del Fangar, en el Delta del Ebro, una nueva población de nacra (Pinna nobilis) que hace albergar nuevas esperanzas sobre la recuperación de las poblaciones de este molusco bivalvo, el mayor del Mediterráneo, considerado en peligro de extinción.
De esta forma se confirmaría que la enfermedad que está asolando la supervivencia de la especie no estaría presente en la Bahía del Fangar y en la mayor parte de la Bahía de los Alfacs, ambas en el Delta del Ebro, según informan al respecto desde el IRTA.
Según reportan desde el Instituto de Investigación, se trataría de varios centenares de individuos sanos, agrupados en densidades localmente altas, de hasta 44 individuos por 100 metros cuadrados. Los ejemplares encontrados son pequeños, de una edad máxima de tres o cuatro años, y en muchas zonas son difíciles de observar ya que están situados bajo la pradera de Cymodocea nodosa, lo que explica el por qué no se tenía constancia de ellos.
Como ya se ha venido explicando en numerosas informaciones desde misPeces, la nacra (Pinna nobilis) se encuentra en peligro de extinción en las costas del Mediterráneo occidental.
La enfermedad más probable y en la que existe mayor consenso por parte de los investigadores es que un protozoo parásito, Haplosporidium pinnae, posiblemente con la ayuda de una Mycobacteria, está afectando de forma generalizada a las poblaciones, provocando tasas de mortalidad de hasta el 100 por ciento.
Las costas de Andalucía, Región de Murcia, Comunidad Valenciana, Islas Baleares y Cataluña se han visto gravemente afectadas, y la enfermedad comienza a notarse también en las costas de otros países tales como Túnez, Francia, Turquía y Grecia.
Durante el pasado verano se ha detectado también la presencia del parásito en la parte más externa de la Bahía de los Alfacs, en el Delta del Ebro, que contaba con más de 90.000 individuos y densidades máximas de 20 individuos por 100 metros cuadrados, y que estaba considerada una de las mayores poblaciones del Mediterráneo.
No obstante, la mayor parte de la Bahía no está afectada y aún quedan miles de individuos sanos, así como numerosos individuos supervivientes dentro de la zona afectada.
El tiempo dirá si la enfermedad evoluciona hacia el resto de la bahía, lo que hace de la nueva población de la bahía del Fangar, hasta el momento sana, un verdadero santuario para la especie. Por el momento, sólo esta población, conjuntamente con la del Mar Menor (estimada en varios miles, según Francisca Giménez de la Universidad de Alicante) está totalmente libre de los microorganismos.