Mucho se viene hablando del gran potencial de las microalgas y cianobacterias para sustituir ingredientes como la harina de pescado o la harina de soja por su alta composición de proteínas y perfil de aminoácidos.
Ambientalmente son también una gran opción ya que no compiten por recursos como la tierra de agricultura o el consumo del agua.
A simple vista parecería que son la ‘gran solución’ nutricional de la acuicultura. Desgraciadamente la realidad es otra y no todas las microalgas y cianobacterias son adecuadas. Hay un factor de digestibilidad de los nutrientes y la energía que juega en contra de éstas.
La digestibilidad de las microalgas y cianobacterias está relacionada con el grosor de la pared celular, la composición de ésta y los nutrientes que aportan. Según la especie, estos factores antinutricionales tienen diferente magnitud y pueden ser superados con distintas estrategias.
Una revisión científica llevada a cabo por investigadores del Programa de Tecnología de Algas de la Universidad de Qatar ha analizado la viabilidad de las distintas especies de microalgas desde un enfoque de digestibilidad para aplicaciones de alimentos para peces llegando a la conclusión de Arthrospira platensis, Chlorellla vulgaris, Isochrysis sp y Schizochytrium.
En su análisis los investigadores han tenido en cuenta nutrientes como la proteína, los lípidos, carbohidratos, aminoácidos, materia seca y energía.
La pared celular y su composición son barreras importantes a la hora de poder incorporar la biomasa de una microalga o cianobacteria en un pienso acuícola. Por ejemplo, mientras los microorganismos eucariotas como las microalgas tienen una capa celulósica en la pared celular más difícil de digerir que la capa de las procariotas como las cianobacterias, que está compuesta de peptidoglicanos.
En este sentido, Nannochloropsis sp ahora llamada Microchloropsis sp, Chlorella, Haematococcus y Desmodesmus, tienen paredes celulares gruesas, esto significa peor digestibilidad. Por el contrario, Isochrysis galbana, Porphyridium cruentum y Dunaliella salina carecen de pared celular, esto significa que la accesibilidad a los nutrientes es mejor.
Otro aspecto que debe ser analizado es el de las proteínas que afectan a la digestibilidad. Algunas inhiben la actividad de las enzimas digestivas. Así, por ejemplo, la pobre digestiblidad de Microchloropsis sp, se atribuye a la cantidad de inhibidor tripsina. Otras especies de microalgas contienen inhibidores de lipasa, que podría afectar a la digestibilidad de las grasas.
Los polisacáridos distintos al almidón también son de difícil digestión ya que algunos peces de producción comercial, como la tilapia, carecen de enzimas digestivas para romper el enlace beta glucosídico presente en éstos.
Para mejorar la digestibilidad de las microalgas se puede optar a varios métodos que pasan por someter la biomasa a un pretratamiento de molido, pasteurización, liofilización, homogeneización a alta presión, campo eléctrico de pulso, ultrasonido, microonda, o la química enzimática.
Según los ejemplos reportados, la molienda mejoró la digestibilidad de Microchloropsis gaditana en dietas de tilapia. En lubina la molienda fue efectiva para el tratamiento de Michrocloropsis sp, Chlorella sp y Tetraselmis sp.
El tratamiento enzimático dio buenos resultados para hidrolizar el 62% de la celulosa de Chlorella pyrenoidosa, aumentando el 75% de la extracción de lípidos.
De manera específica, la digestibilidad de materia seca debe ser estudiada según el tipo de nutriente. Así, por ejemplo, una microalga puede tener una buena digestibilidad de sus proteínas y aminoácidos, pero no de sus lípidos.
Mejorar las técnicas de tratamiento de la biomasa algal es fundamental para conseguir un coste – beneficio efectivo y hacer de las microalgas una materia prima de uso masivo en nutrición acuícola.
Referencia:
Annamalai, Senthil N., Probir Das, Mahmoud I.A. Thaher, Mohammad Abdul Quadir, Shoyeb Khan, Chandan Mahata, and Hareb Al Jabri. 2021. "Nutrients and Energy Digestibility of Microalgal Biomass for Fish Feed Applications" Sustainability 13, no. 23: 13211. https://doi.org/10.3390/su132313211