
Los colorantes alimentarios sintéticos usados en bebidas pronto podrán ser reemplazados por otros de origen natural, específicamente, de microalgas marinas.
Investigadores del Departamento de Química Física de la Escuela Politécnica Superior de Linares (EPSL) de la Universidad de Jaén han logrado desarrollar diferentes matrices líquidas en las que se han reemplazado los colorantes sintéticos por otros de origen natural. Como valor añadido, como señalan desde la entidad universitaria, éstas tienen la capacidad antioxidante y completamente biodegradable de las microalgas.
Los resultados del estudio se han publicado en la revista Journal of Applied Phycology donde ponen de manifiesto la capacidad del colorante ficoeritrina procedente del alga Porhyridium cruentum para colorar tanto bebidas no alcohólicas como aguas tónicas e isotónicas, como vinos y ginebras.
La investigación ha estado liderada por el profesor de Química Física y responsable del Grupo de Investigación FQM-337 en la EPSL, Ruperto Bermejo, quien ha explicado que este proyecto surge en un contexto de crecimiento en el uso de aditivos alimentarios de carácter natural.
Se trata de reemplazar a los que mayoritariamente se vienen utilizando en la industria agroalimentaria que son de carácter sintético-artificial. Al respecto, ha considerado que "el consumidor, cada vez más, apuesta por la compra de productos con etiqueta natural y saludable, haciendo que la industria busque soluciones a esta creciente demanda"
"Hemos utilizado un extracto proteico de ficoeritrina que posee un intenso y atractivo color rosa. Se han buscado bebidas que actualmente se estén vendiendo en el mercado con esta tonalidad y se ha ensayado la sustitución de los colorantes sintéticos que llevan en su formulación, por el extracto proteico que nuestro grupo de investigación tiene protegido a través de la correspondiente patente", ha explicado Bermejo.
Actualmente, han proliferado en el mercado bebidas con diversidad de colores (rosados, verdes, azulados...) todos ellos generados mayoritariamente por el uso de aditivos de la familia de los colorantes sintéticos.
El objetivo del estudio ha sido ensayar la formulación de nuevas bebidas con tonalidad rosa de diferente composición (isotónicas, tónicas, ginebras y vinos) pero utilizando compuestos colorantes naturales.
Se ha estudiado la influencia de cada uno de los medios en la estabilidad del color generado en las distintas muestras, analizando variables tan importantes como el pH o la concentración de colorante incorporada. Además, se ha analizado la influencia en las nuevas bebidas formuladas con el colorante natural, de variables de degradación tales como el tiempo, la temperatura y la exposición a la radiación.
"Los datos obtenidos muestran la potencial capacidad colorante del extracto de ficoeritrina en las diferentes bebidas ensayadas, lo que abre una puerta muy interesante para el uso comercial del mismo", ha comentado el investigador, para el que estos resultados pueden ser el inicio de la explotación industrial de las patentes de colorantes que la UJA posee.
Otro aspecto importante es que las muestras de bebidas generadas han sido sometidas a valoración organoléptica por parte de un panel de especialistas y se han logrado resultados que muestran una valoración muy positiva de los nuevos productos frente a los actualmente presentes en el mercado.
Al hilo, ha apuntado que los resultados obtenidos vienen a completar otros previos, que en el marco del proyecto de investigación en desarrollo, mostraron también la potencialidad colorante de este mismo extracto en matrices de tipo lácteo.
Junto al profesor Ruperto Bermejo, el estudio tiene como coautores a la doctora María del Carmen Murillo (UJA), la estudiante de doctorado Raquel Carmona (UJA) y el investigador posdoctoral Tomás Lafarga (UAL). Ha contado con financiación Feder a través del proyecto Algfood (UAL2020-AGR-A1945).