
Estos días se ha abordado en el Parlamento Europeo la propuesta de la Comisión para garantizar el bienestar animal durante el transporte, a cuyo respecto, el eurodiputado español, Gabriel Mato (PP), actual presidente de la Comisión de Pesca, ha expresado su preocupación al respecto que la nueva regulación pueda “perjudicar la viabilidad económica, o la competitividad de los pescadores y acuicultores de la Unión Europea”.
A lo que añadió que tampoco “podemos añadir más cargas a los operadores europeos, que ya afrontan un exceso de burocracia y falta de competitividad, especialmente frente a productos importados”.
Como explicó Matos, la prioridad debe ser reforzar las normas para las importaciones, en lugar de imponer más restricciones a los de la Unión Europea, “porque sólo vamos a provocar un aumento de importaciones de países con estándares mucho más bajos en bienestar animal y sostenibilidad”, añadió.
Según el eurodiputado, las medidas también tienen que reconocer las limitaciones geográficas y climáticas de los distintos Estados miembro, en especial de las regiones ultraperiféricas. Es necesario, indicó, “encontrar un equilibrio que permita mejorar el bienestar animal, pero sin comprometer la seguridad y el futuro de los operadores”.
Cabe recordar que esta propuesta de regulación que ahora se está debatiendo busca incluir por primera vez a los animales acuáticos, lo que ha generado un intenso debate sobre su impacto en la industria pesquera y acuícola.
Entre otros aspectos, esta regulación quiere extender las protecciones de bienestar a los animales acuáticos durante su transporte, reconociendo que, al igual que los animales terrestres, estos también experimentan dolor y estrés. Se busca minimizar el transporte de animales vivos y promover el sacrificio en el sitio siempre que sea posible, para reducir el sufrimiento durante largas distancias y mejorar la sostenibilidad de las prácticas de transporte.