Las principales organizaciones representativas del sector de la pesca, acuicultura, transformación y comercialización en España han renovado su llamado al nuevo Gobierno para que incluya al pescado y al marisco en la lista de alimentos básicos sujetos a la prórroga de las medidas de reducción o supresión del IVA hasta junio de 2024. Esta solicitud se realiza con el objetivo de aliviar la carga económica sobre los consumidores y garantizar el acceso a alimentos esenciales.
En la misiva, las organizaciones representativas del sector pesquero y acuícola ha instado a Pedro Sánchez a demostrar el “carácter social” de su próximo gobierno y facilitar el acceso a estos alimentos, especialmente importantes en capas de la población más afectadas por el aumento de los precios.
Además, hace hicapié en que cada vez más organizaciones, como la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), FIAB y AECOC, se unen a esta petición para extender la reducción o supresión del IVA al 4% para una mayor variedad de alimentos básicos, en particular, el pescado y la carne.
El sector pesquero español alerta sobre la disminución gradual del consumo de pescado en el país, que ha caído un 31,91% en los últimos 10 años, lo cual afecta directamente a la dieta mediterránea, considerada saludable. Por otro lado, el índice de Precios de Consumo (IPC) de octubre revela que la subida anual de los alimentos sigue siendo alta, con un 9,5%, aunque los pescados y mariscos son de los alimentos que menos han aumentado su precio en los últimos 18 meses.
Según las estimaciones del sector, la reducción del IVA del 10% al 4% para los productos pesqueros resultaría en una disminución de la recaudación de IVA de menos de 500 millones de euros, cifra que se vería compensada por la reducción de los costos relacionados con enfermedades derivadas de una mala alimentación.
El sector pesquero insiste en que esta medida no solo equipararía a España con otros países de la Unión Europea que ya han tomado medidas similares, sino que también protegería los derechos de los consumidores, promovería una dieta saludable y frenaría la caída del consumo de pescado en el país. En este sentido, el sector confía en que el nuevo Gobierno aproveche esta oportunidad para demostrar su compromiso con la promoción de una alimentación saludable entre los españoles.