Investigadores vascos a través del proyecto Akure quieren potenciar el cultivo del mújol (Mugil cephalus) en esta comunidad autónoma, donde es una especie descartada para consumo humano por su “mala fama” al asociar su presencia a puertos y zonas en las que se producen vertidos de aguas residuales.
Sin embargo, los mugílidos son peces cosmopolitas que habitan en aguas de medio mundo y son bien conocidos. Dependiendo de la procedencia suele ser un pescado apreciado, como el que se cría en los esteros de Andalucía o en el Levante español, o de bajo valor comercial en otras regiones.
En Akure, participan investigadores de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), del Centro Tecnológico Gaiker, la escuela de acuicultura de Mutriku y la plataforma de acción empresarial BCTA. Ahora ellos serán los encargados de valorizar esta especie en la comunidad autónoma.
El proyecto, que cuenta con financiación del Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca (FEMP), busca de esta manera contribuir a consolidar la viabilidad técnica del cultivo y engorde de estos mugílidos hasta alcanzar un kilogramo de peso. Para ello, los distintos ensayos que se están llevando a cabo buscan definir las condiciones óptimas que permitan repetir puestas en cautividad en el momento justo y con la periodicidad deseada.
Además, y como ya se está haciendo en otros proyectos con mugílidos, se buscará desarrollar piensos adecuados para la especie. En este caso se quiere mejorar el contenido de Omega-3 incluyendo en los piensos microalgas.
Durante los ensayos, los investigadores han conseguido puestas controladas y el engorde con una “muy baja tasa de mortalidad”. Por otro lado, las catas a ciegas permitirán mejorar la percepción que se tiene de la especie común en aguas de las costas vascas.