
Castellón 29/12/2020 - Una proteína en los peces podría contener la clave para hacerlos menos agresivos y de esta forma más aptos para su cultivo ganadero. Esta proteína es la ASIP, la proteína de señalización agonista (agouti-signaling protein, en inglés) está relacionada con la pigmentación de la piel cuando se encuentra en el sistema de melanocortinas y con la regulación del balance energético.
Investigadores del Instituto de Acuicultura Torre de la Sal del CSIC (IATS-CSIC) ha publicado este año un trabajo en el que han analizado el comportamiento del pez cebra (Danio rerio) transgénico con capacidad para sobreexpresar agonistas inversos, es decir la ASIP y la proteína relacionada con agutí (AGRP) en todos sus tejidos para que crezca más comiendo igual que los peces no transgénicos, y que soporten mejor el estrés por alta densidad de cultivo. Y todo esto, sin que los peces sean obesos, algo que comprobaron analizando su contenido en lípidos. En definitiva, estos peces tienen una mejor eficiencia alimentaria.
En este trabajo, que forma parte de la investigación de Alejandra Godino, se ha podido demostrar a través de experimentos conductuales cómo los peces transgénicos son menos agresivos. Estos peces ASIP, señala la investigadora, pueden ser de gran ayuda para el avance de la acuicultura ya que, no solo crecen más comiendo igual, sin ser obesos, sino que, además, en caso de escape serían fácilmente identificables por tener una pigmentación más clara, y no desplazarían a las poblaciones salvajes al ser menos agresivos”.
Este tipo de modificación es especialmente interesante para ser aplicada en Estados Unidos donde ya hay aprobado el cultivo de peces transgénicos para alimentación humana.
Referencia:
Alejandra Godino-Gimeno, Elisa Sánchez, Raúl Guillot, Ana Rocha, Anna Rita Angotzi, Esther Leal, Josep Rutllant, José Miguel Cerdá-Reverter. Growth performance after agouti-signaling-protein (ASIP1) overexpression in transgenic Zebrafish. Zebrafish 2020 https://doi.org/10.1089/zeb.2020.1932