El premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz ha hecho un llamamiento durante su ponencia en la Conferencia de AquaVisión sobre la necesidad que tenemos en operar dentro de “unos límites medioambientales seguros”.
A lo largo de estos años, señaló Stiglitz, “hemos ido tomando conciencia de esos límites planetarios. Tenemos que aprender a vivir con ellos y respetarlos”, indicó.
Stiglitz cree que a pesar de la coyuntura actual en la que estamos, con un periodo de turbulencias sin precedentes debido a la pandemia y la invasión rusa de Ucrania, con precios de los alimentos en el máximo como resultado directo, no cree que debería haber ningún problema en cuanto al suministro real de alimentos.
En las últimas décadas, señaló, “el problema ha sido el exceso de oferta, con una implicación importante de la política económica de los gobiernos de Estados Unidos y Europa para reducir la producción de alimentos y hacer que los agricultores no cultiven”. "Tenemos la capacidad de producir mucho más", indicó.
Stiglitz sostiene que no producir alimentos de forma sostenible tendrá consecuencias financieras, incluso habrá casos en los que suponga un coste adicional.
"Si no nos comprometemos a ser ecológicos habrá un efecto en el cambio climático y eso encarecerá los alimentos. Nuestra sociedad va a pagar el coste de una forma u otra: tenemos que tomar medidas a tiempo y prevenir lo que ocurrirá si no lo hacemos".
También advirtió que existen graves problemas en cuanto a la distribución, así como en la forma de producción y consumo de alimentos. Mientras que Europa y América tienen un enorme potencial para producir más, África tendrá problemas.
El premio Nobel estima que es probable que haya más agitación en los mercados a corto plazo. Históricamente, indicó, la escasez de alimentos y los precios elevados han provocado un aumento de la volatilidad y la agitación política. Y en este momento, con este tipo de aumentos de precios de los alimentos que se suman a la pandemia, “podemos esperar una época aún más turbulenta que la que acabamos de atravesar en los últimos dos años".
Dicho esto, Stiglitz sigue siendo "muy optimista" respecto al futuro de los alimentos a largo plazo, entre otras cosas por los grandes avances de la ciencia y la tecnología.
"Lo hemos visto con las energías renovables, y lo vamos a ver en la producción de alimentos con la mejora de la eficiencia". "También va a haber cambios importantes en lo que consumimos. Vemos las tendencias. Mis alumnos, por ejemplo, pasan cada vez más de la carne al pescado, al vegetarianismo y al veganismo", indicó.