INSTRUMENTO FINANCIERO

La UE presenta la hoja de ruta de los Créditos de la Naturaleza: un impulso financiero para la biodiversidad y la acuicultura

Bruselas, 14/07/2025 | La Comisión Europea propone un nuevo instrumento financiero para apoyar la restauración de la biodiversidad, reforzar la bioeconomía y recompensar las acciones positivas para la naturaleza

SALEMPRENDE - Esteros de Cádiz

La Comisión Europea ha presentado un ambicioso plan para poner en marcha los créditos de la naturaleza como nuevo instrumento financiero destinado a apoyar la restauración de la biodiversidad, fortalecer la bioeconomía y recompensar las acciones positivas para el medioambiente. Esta medida podría suponer un impulso significativo para sectores como la pesca y la acuicultura, que dependen especialmente del buen estado de los ecosistemas marinos y de agua dulce.

Al facilitar inversiones en actividades que benefician a la naturaleza, estas herramientas innovadoras y voluntarias pueden desempeñar un papel adicional crucial en la preservación de la salud de nuestros ecosistemas terrestres y marinos”, señaló la Comisión en su comunicación oficial.

El núcleo de esta iniciativa es el documento titulado “Hoja de ruta hacia los Créditos de la Naturaleza” (COM(2025) 374 final), que detalla cómo los sistemas voluntarios de certificación y créditos, con altos estándares de integridad, podrían complementar la financiación pública existente para la conservación. El objetivo final es crear un mecanismo mediante el cual agricultores, pescadores, propietarios de tierras, silvicultores y gestores de conservación sean recompensados económicamente por mantener o mejorar el capital natural.

Los créditos de la naturaleza se definen como unidades voluntarias que representan mejoras certificadas y medibles en la biodiversidad, basadas en un modelo de dos fases: Certificación de acciones positivas para la naturaleza y emisión de créditos basados en resultados ecológicos verificados.

Estos créditos podrían ser adquiridos por empresas, instituciones públicas o particulares para apoyar la conservación o cumplir compromisos medioambientales.

Para el sector de la acuicultura, la hoja de ruta representa una oportunidad prometedora. Se destacan las iniciativas de financiación mixta—proyectos que combinan inversión pública y privada—como apoyo a actividades como el cultivo de algas, la cría de moluscos o la restauración de hábitats marinos. Una de estas iniciativas, liderada por la Global Seaweed Coalition y el Banco Europeo de Inversiones, está explorando oportunidades de inversión en la producción sostenible de algas y bivalvos.

Aunque la hoja de ruta no se centra exclusivamente en la acuicultura, confirma que se llevarán a cabo proyectos piloto locales, incluidos en zonas costeras y humedales, para probar el sistema de créditos de la naturaleza, lo que proporcionará información valiosa para su aplicación en entornos marinos.

Los beneficios potenciales para el sector son evidentes: actividades como la restauración de humedales, los sistemas de acuicultura de bajo impacto o la mejora de hábitats podrían certificarse y convertirse en créditos comercializables, generando nuevas fuentes de ingresos mientras se contribuye a los objetivos de conservación.

El documento también presenta el argumento económico de forma clara: el 72% de las empresas de la zona euro dependen críticamente de servicios ecosistémicos como la polinización, la captura de carbono, la purificación del agua y la biodiversidad marina. Sin embargo, a pesar del compromiso de la UE de destinar un 10% de su presupuesto 2026–2027 a la biodiversidad, esta cifra queda por debajo de los 65.000 millones de euros anuales estimados necesarios para restaurar eficazmente los ecosistemas.

Este déficit financiero, junto con la dimensión global de las cadenas de suministro, está impulsando el esfuerzo de la Comisión por movilizar capital privado y recompensar la gestión ambiental responsable.

La hoja de ruta incluye un cronograma claro: En 2025, se establecerá un grupo de expertos de la UE sobre créditos de la naturaleza y se lanzará un proyecto piloto con financiación inicial pública. Durante 2026, se desarrollarán metodologías de certificación y comenzará la certificación de proyectos de agricultura de carbono con beneficios para la biodiversidad. Finalmente, en 2027, la UE tiene previsto diseñar un marco de gobernanza, evaluar los avances y considerar posibles vías normativas para ampliar los mercados de créditos de la naturaleza.

Para los profesionales de la acuicultura y sectores afines, esta iniciativa ofrece algo más que oportunidades de financiación: supone un cambio de paradigma, una nueva forma de valorar los servicios esenciales que proporciona la naturaleza y de reconocer a quienes trabajan en armonía con los ecosistemas naturales.

A medida que la naturaleza se consolida como un activo reconocido en la planificación económica y financiera, el sistema de créditos de la naturaleza podría posicionar a los operadores de acuicultura como protagonistas clave en la transición hacia un futuro más verde y resiliente.

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