
Los técnicos de la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (AGAPA) han recogido en el último informe de la actividad cómo el sector de la acuicultura andaluza ha sabido estar a la altura de las circunstancias durante la pandemia en lo que se refiere a la conservación del empleo, a pesar de la fuerte caída de las ventas.
Según destacan en el informe, la acuicultura es una actividad que genera empleo sólido y a largo plazo. A pesar de los descensos significativos de 35% en volumen respecto al año anterior y 28% en valor económico, el empleo se mantuvo en 937 puestos de trabajo, lo que supone, tan solo, un 0,3 por ciento menos que en 2019.
Las granjas marinas en mar abierto generan el 20% del total de las horas efectivas trabajadas, quedando el resto para las actividades que se desarrollan en los criaderos y los preengordes y las granjas en tierra.
Durante el último decenio, el crecimiento del empleo experimentado ha sido de 3,5% en número de trabajadores. Las horas anuales efectivas trabajadas fueron de 904 772, lo que representa un descenso de 4% respecto al año anterior y un valor algo inferior al promedio del último decenio que se situó en 950 000 horas.
A los empleos directos le sumamos los indirectos, relacionados con las actividades auxiliares como la transformación, la elaboración, el envasado, la comercialización y la distribución de productos; o la fabricación y mantenimiento de equipos e instalaciones, materias primas, consultoras, comunidad científica y administraciones implicadas.
La provincia de Cádiz es la que concentra el mayor número de contrataciones con un 69% del total. Le siguen Almería con 12% y Huelva con 11%. Siguen Sevilla con 5%, Málaga con 2% y Granada con 1%.
El empleo creció en Cádiz 4% y Huelva 2% y se redujo en Málaga -50%, Granada -33%, Sevilla – 4% y Almería - 0,9%.
Entre los temas pendiente del sector, como en la mayoría de actividades del sector primaria está alcanzar una mayor paridad entre sexos. Por el momento, el 90% del total de labores están desempeñadas por hombres, lo que deja muy lejos que se alcance el equilibrio.