
El grupo atunero gallego Atunlo ha inagurado una planta en O Grove para el procesado de cabezas de atún con la finalidad de obtener aceite de pescado neutralizado rico en omega-3 para consumo humano. Se trata de un proyecto ambicioso y pionero en el mundo en el que se apuesta por la economía circular, la industria 4.0 y la descarbonización para el máximo aprovechamiento de la materia prima.
Gran parte de la energía que proveerá la planta será fotovoltaica, mientras que el producto final, el aceite de pescado, se comercializará gracias a un acuerdo alcanzado con la multinacional japonesa Nissui, mediante el cual todo el producto será exportado a Japón.
El aceite servirá para enriquecer las fórmulas infantiles de los biberones y de los potitos de bebé. Este tipo de fábricas además destacan por la generación de empleo de alta cualificación, dado el alto grado de automatización del nuevo proceso, y por la dotación de mayor valor a los productos que “con tanto esfuerzo extraen las trabajadoras y trabajadores del mar”.
Rosa Quintana, conselleira del Mar de Galicia destacó durante la inauguración de la planta la importancia del sector del procesado y de la transformación de recursos pesqueros al consolidarse en la comunidad como la base sobre la que levantar un sólido tejido empresarial referente a nivel nacional e internacional en competitividad y excelencia.
Atunlo es una empresa especializada en el suministro de atún como materia prima para la industria conservera y alimentaria. Tiene cinco plantas de producción propias, dos de ellas en Galicia –Cambados y O Grove–, una en Santoña, Cantabria. Otra en Portugal, Vilanova de Cerveira, y otra en Mindelo, Cabo Verde, con capacidad para 354 toneladas diarias en total. Cuenta con una plantilla de 1.200 profesionales y, a cierre de 2022, su volumen de ventas rondó los 220 millones de euros.