
La producción global de harina y aceite de pescado mantiene su tendencia al alza, según el último informe de inteligencia de mercado publicado por IFFO – la Organización de Ingredientes Marinos. En los tres primeros meses de 2025, la producción acumulada de harina de pescado aumentó un 29% respecto al mismo periodo del año anterior. Este crecimiento ha sido liderado principalmente por Perú, que ha registrado un repunte significativo en su actividad extractiva. También han contribuido positivamente otros países productores como Chile, Estados Unidos, España y diversas naciones africanas.
En el caso del aceite de pescado, el incremento interanual ha sido aún más notable. Hasta marzo de 2025, la producción acumulada creció un 34% en comparación con el primer trimestre de 2024, nuevamente con Perú como motor principal. Todas las regiones analizadas han reportado una evolución positiva salvo Europa, donde se ha observado una caída en la producción acumulada de aceite.
Los datos presentados por IFFO se basan en estadísticas aportadas por sus miembros en países clave del sector: Chile, Dinamarca, Islas Feroe, Islandia, Costa de Marfil, Mauricio, Noruega, Reino Unido, Estados Unidos, Perú, Sudáfrica y España. En conjunto, estos países representan el 40% de la producción mundial de harina de pescado y el 50% de la de aceite de pescado.
China anticipa una mayor demanda de ingredientes marinos
En paralelo, el mercado chino se prepara para un aumento en la demanda de ingredientes marinos a lo largo de 2025. Las recientes vedas pesqueras en el país asiático, activas desde el 1 de mayo hasta agosto o septiembre, implican que gran parte de las materias primas necesarias para la producción de harina y aceite de pescado deberán ser importadas en forma de pescado congelado o sardinas.
“Los precios en la granja de varias especies con altas necesidades dietéticas de harina de pescado han superado los niveles de hace un año”, señala el informe. Esta situación sugiere un mayor dinamismo en la producción acuícola nacional, lo que a su vez favorecerá la demanda de ingredientes marinos.
Además, el sector porcino chino también está mostrando signos de recuperación. “Los criadores de cerdos han expresado un creciente optimismo para la segunda mitad del año”, indica IFFO, lo que ha impulsado las compras de lechones y, por ende, se prevé un aumento en la producción de piensos especializados que emplean harina de pescado.
El contexto global de encarecimiento de los ingredientes vegetales para piensos –como la harina de soja, el maíz y la harina de colza– está llevando a los fabricantes de alimentos balanceados a buscar alternativas. Estas tensiones en la oferta, agravadas por conflictos comerciales internacionales, están generando un renovado interés por los ingredientes marinos como solución para estabilizar costes y mantener la eficiencia nutricional en la formulación de piensos.