SOCIEDAD

Licencia social para operar: el contexto nacional define el éxito de la acuicultura

Noruega 4/11/2024 | Entender el contexto social y ambiental es vital para el desarrollo sostenible de la acuicultura en cualquier país

MOWI granja salmón en Noruega

A medida que la actividad acuícola va siendo más conocida por la ciudadanía se van produciendo dos fenómenos antagónicos. De una parte, se eleva el nivel de aceptación y apoyo social de los productos acuícolas y la actividad y, en paralelo, crece la preocupación por el impacto ambiental y la sostenibilidad.

Un reciente estudio internacional, liderado por Marit Schei Olsen de NTNU Social Research en Noruega, respalda la idea de que el nivel de conocimiento influye en la percepción pública. Cuando las personas comprenden bien la actividad acuícola, su propósito y beneficios, es más probable que la acepten. Por el contrario, la falta de información o la presencia de desinformación puede llevar a una percepción negativa.

La transparencia y la claridad en la comunicación de la industria es, por tanto, clave. Así lo consideran los investigadores después de analizar la percepción pública de la acuicultura en Noruega, Islandia y Australia. El estudio comparó la licencia social para operar en estos países, subrayando diferencias significativas en la forma en que se percibe la industria, a pesar de que todos producen salmón de manera similar. Estas diferencias reflejan cómo el contexto local influye en la aceptación y el apoyo a la acuicultura.

Como destacan los autores de este trabajo publicado en la revista científica Aquaculture con el título 'Social license to operate for aquaculture – A cross-country comparison', la percepción pública también depende de si la comunidad percibe que los beneficios de la industria se distribuyen de manera justa. Si la comunidad siente que los beneficios económicos no son equitativos o que la industria no contribuye al bienestar local, el apoyo puede disminuir.

En Noruega, por ejemplo, existe un 'orgullo nacional' por el sector del salmón por su posición de liderazgo e historia, convirtiéndose en una parte importante de la identidad nacional. El éxito de la industria es visto como un logro en términos de innovación tecnológica, producción sostenible y competitividad en el mercado global. En general, existe un sentimiento de que la industria del salmón beneficia al país. Eso no quita que también existan preocupaciones crecientes sobre la fuga de salmones y los parásitos, lo que genera un debate sobre cómo equilibrar el crecimiento del sector con la sostenibilidad ambiental.

En contraste, en Islandia, donde la industria del salmón es más reciente, y aún se enfrenta a desafíos regulatorios y de percepción, la licencia social es más limitada, con una mayor proporción de la población que expresa su desconfianza con la regulación y preocupaciones sobre el posible impacto en los ecosistemas locales.

El tercer caso es el de Tasmania, en Australia, y sirve como ejemplo claro sobre cómo la percepción pública sobre la actividad acuícola ha ido cambiando con el tiempo. Inicialmente hubo un fuerte apoyo a la industria del salmón, pero en los últimos años ha habido una creciente preocupación por los impactos ambientales, lo que ha reducido el nivel de apoyo. Este cambio ha sido influenciado por campañas dirigidas por ambientalistas y cobertura mediática que se han enfocado en amplificar los potenciales problemas de sostenibilidad.

Según datos del estudio, aproximadamente el 70% de los encuestados en los tres países expresan una fuerte preocupación ambiental. Especialmente en Islandia, donde la desconfianza hacia la industria es mayor. En general, existe una percepción general de que los beneficios económicos de la industria no se distribuyen de manera equitativa. Este es un punto importante de desacuerdo entre países, siendo Islandia, de nuevo, el país que representa una percepción más negativa al respecto.

Por eso es importante tener en cuenta que la aceptación social de la acuicultura depende del equilibrio entre los beneficios percibidos y los posibles impactos, y de cómo la industria responda a las inquietudes de la comunidad.


Referencia:

Olsen, M. S., Amundsen, V. S., Alexander, K. A., Thorarinsdottir, R., Wilke, M., & Osmundsen, T. C. (2024). Social license to operate for aquaculture – A cross-country comparison. Aquaculture, 584, 740662.

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