Un reciente análisis sobre la acuicultura del langostino tropical vannamei (Litopenaeus vannamei) en sistemas RAS (Sistemas de Recirculación en Acuicultura) considera que se trata de un modelo con futuro por ser de alto rendimiento, totalmente controlable y sostenible. No obstante, el principal obstáculo para su expansión radica en ser una tecnología de alto consumo energético.
Esto significa que, si bien permite producir el langostino vannamei de forma continua en cualquier lugar, independientemente del clima y la ubicación, el alto coste operativo de mantener en funcionamiento equipos de filtración, bombeo y control de calidad del agua amenaza con frenar su adopción.
Por tanto, para asegurar su posición como tecnología líder, la investigación debe dirigir sus esfuerzos hacia el ahorro energético y reducción de emisiones a través de equipos y operaciones que disminuyan “drásticamente la factura eléctrica”.
La mejora operacional a través de incrementar la eficiencia y la tasa de éxito del cultivo, es otra de las líneas en las que trabajar.
Y, finalmente, será importante, lograr el control preciso y automático de todos los parámetros del equipo, lo que a su vez podría llevar a una mayor eficiencia energética.
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