Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Murcia arrojó luz sobre la preferencia térmica de la tilapia del Nilo y cómo factores como los ciclos de luz y oscuridad, los horarios de alimentación y el estrés impactan su comportamiento térmico. Estos hallazgos tienen implicaciones significativas tanto para la acuicultura como para la comprensión de los ritmos biológicos en los peces, y pueden ser utilizados para mejorar la adaptación y el bienestar de las tilapias en ambientes controlados.
El estudio reveló que la tilapia del Nilo muestra un marcado ritmo diario de preferencia térmica, con una predilección por temperaturas más altas al anochecer y más bajas al amanecer, independientemente de las condiciones investigadas. El ciclo de luz y oscuridad resultó ser el principal factor que sincroniza este ritmo, aunque los horarios de alimentación también influyeron en la preferencia térmica.
Un aspecto particularmente interesante fue la respuesta al estrés en la elección de la temperatura. Cuando los peces se enfrentaron a un nuevo entorno, mostraron una preferencia por temperaturas más elevadas, lo que se interpreta como una respuesta al estrés. Sin embargo, cuando se eliminaron todas las señales ambientales y se mantuvieron en condiciones constantes de luz y temperatura, el ritmo térmico persistió de manera endógena.
Además, se descubrió que los horarios de alimentación desempeñan un papel importante en la elección de la temperatura. Cuando se sometió a los peces a horarios regulares de comida, seleccionaron temperaturas más bajas antes de la alimentación y temperaturas más altas después de la misma. Esta respuesta sugiere una adaptación para maximizar la eficiencia en la digestión y el metabolismo.