
Lisboa 15/01/2021 – La nanotecnología para detectar biotoxinas marinas que afectan a los moluscos bivalvos puede convertirse en un importante aliado de la industria gallega de mejillón gracias a los avances del proyecto “Transferencia y valorización de nanotecnologías a pymes innovadoras" de la Eurorregión Galicia - Norte de Portugal.
Este proyecto está liderado por el Laboratorio Ibérico Internacional de Nanotecnología (INL), con sede en Braga, Portugal, y la Universidad de Vigo, y está listo para ser testado en, al menos, una empresa gallega.
Begoña Espiña, investigadora del proyecto ha señalado que después de 3 años de trabajos y si todo sigue según lo previsto, pronto se comenzará a probar con empresas.
La nanotecnología desarrollada, según explica Espiña, está compuesta de una cámara hecha en acrílico, que lleva microlitros y esta conectado a un sistema de tubos. Dentro de la cámara hay inmovilizada una enzima que es la que, con su actividad, avisa de la presencia de toxina. Con este avance tecnológico el equipo ha conseguido "unos datos que superan a los test comerciales que se utilizan actualmente en plantas de explotación de acuicultura".
Este mecanismo, como señala la investigadora, permite de forma más temprana evitar que los moluscos se contaminen hasta un nivel que impida su consumo, algo que mejorará la actividad ya no solo en el norte de España y Portugal, sino también en la sureña región lusa del Algarve, donde hay una fuerte presencia del cultivo de ostras.