La tecnología de biofloc ha captado la atención de una parte de los productores por ser una solución efectiva para producir pescado y marisco durante todo el año, en ubicaciones remotas y con un impacto ambiental reducido, en comparación a las prácticas convencionales de acuicultura que requieren ambientes bien adaptados a las especies que se quieren cultivar.
Los sistemas biofloc hacen un uso limitado de agua y reduce el coste del tratamiento de esta un 30%, acortando el periodo de cultivo, mejorando las tasas de supervivencia y el rendimiento de la producción.
Además, los sistemas biofloc han demostrado ser eficientes económicamente al exhibir costes operativos más bajos, un mayor retorno de inversión y menores gastos en el alimento y medio ambiente.
Sin embargo, los expertos explican que es importante seguir centrándose en estandarizar su tecnología y aumentar la investigación en economía de la producción y gestión para garantizar el éxito y el crecimiento a largo plazo.
Entre los desafíos a los que se enfrenta esta tecnología están la gestión inapropiada de la calidad del agua como pH, alcalinidad, solidos suspendidos totales y nitratos. Otro desafío tecnológico está en la eliminación de los sólidos derivados de la limpieza rutinaria de lodos y filtros mecánicos, ya que concentraciones elevadas de sólidos pueden afectar negativamente la salud de los peces.
En general estos sistemas tienen una alta demanda energética, con inversiones altas al inicio. Para la formación de los flóculos los sistemas requieren de aireación continua y fuerte, lo que conlleva altos costes operativos.
Por eso, explican, es importante estandarizar el diseño del sistema, de los equipos y técnicas de aireación para minimizar los costes energéticos.
También es importante establecer que tipo de biofloc es el que mejor funciona, ya que existen sistemas de agua verde y agua marrón, cada uno con sus propias ventajas y desafíos. Los sistemas in situ y ex situ ofrecen beneficios diferentes en términos de control de nutrientes y demanda de oxígeno.
La fuente de carbono para estimular la actividad bacteriana también implica un coste, por lo que es importante para garantizar el rendimiento y la calidad del agua.
También es importante establecer medidas correctas para la forma del estanque, su tamaño, profundidad y sistema de drenaje.
Dependiendo del país, faltan programas de formación y educación para contar con personal cualificado.
El desarrollo continuo e innovación de la tecnología de biofloc, señalan los investigadores, contribuirá a la creación de prácticas acuícolas más eficientes y sostenibles, beneficiando tanto al sector como al medio ambiente.