En la acuicultura moderna, la búsqueda de métodos que aumenten la producción sin comprometer la integridad del medio ambiente ha llevado al desarrollo de estrategias de baja inversión y bajo coste que aplican tecnologías de cultivo innovadoras y sostenibles como los sistemas autotróficos, bioflocs y sinbióticos.
Estos métodos no solo buscan maximizar la producción de especies como la tilapia, sino que también se esfuerzan por minimizar los desechos y el uso excesivo del agua y los piensos comerciales.
Por sistema de producción autotrófica para cultivo de tilapia se entiende aquella en la que se usan fertilizantes inorgánicos para promover el crecimiento del fitoplancton. En estos sistemas se busca que haya una relación de nitrógeno y fosfato adecuada. Para ello, se agrega nitrato de potasio y superfosfato y se hacen cambios de agua diarios y adicionales dos veces a la semana para compensar la evaporación y mantener los niveles de amoniaco.
Más extendido quizá son los bioflocs, sistemas que utilizan materia orgánica, azúcar, que estimulan el crecimiento de bacterias heterotróficas y flocs microbianos. Este sistema ayuda a mantener la calidad del agua al convertir el nitrógeno amoniacal en biomasa bacteriana, lo que reduce la necesidad de cambios de agua y puede contribuir a una mayor eficiencia alimenticia y crecimiento de la tilapia.
El tercer sistema propuesto combina técnicas de bioflocs con la adición de prebióticos y probióticos. Por ejemplo, salvado de arroz fermentado con una mezcla de bacterias del tipo Bacillus. Este sistema también busca mejorar la calidad del agua y la salud de los peces mediante la modulación de la microbiota y la reducción de patógeno, al tiempo que potencia el crecimiento del fitoplancton y zooplancton beneficiando el crecimiento de la tilapia.
La pregunta que surge a continuación es ¿cuál es el método más adecuado para cultivar la tilapia de manera sostenible? Según un estudio de investigadores de la Universidad Federal Rural de Pernambuco, en Recife, Brasil, publicado recientemente en Aquaculture, los sistemas bioflocs y los simbióticos, aunque dependerá de las condiciones específicas y los objetivos de cultivo.
Según los resultados del estudio, los sistemas bioflocs son ampliamente reconocidos y aplicados por su robustez y efectividad en la mejora de la calidad del agua y la eficiencia alimenticia, mientras que los sistemas simbióticos ofrecen beneficios adicionales en términos de salud y bienestar animal, pudiendo ser más adecuados en contextos donde la gestión de la salud de los peces es una prioridad.
Finalmente, señalan los autores de este trabajo, la elección debe basarse en una evaluación detallada de las condiciones locales y recursos disponibles, así como los objetivos específicos del cultivo.
Cada tecnología tiene su enfoque en cómo gestionar la calidad del agua, la alimentación y el crecimiento de la tilapia, buscando optimizar diferentes aspectos del cultivo para mejorar la producción y la sostenibilidad.
Referencia:
Nunes, L. J. L., Campos, C. V. F. da S., da Silva, S. M. B. C., Gálvez, A. O., Brito, L. O., & dos Santos, J. F. (2024). The culture of Nile tilapia (Oreochromis niloticus) juvenile at different culture technologies: autotrophic, bioflocs and synbiotic. Aquaculture, 588(2024), 740912.
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