Durante más de tres años expertos tecnólogos europeos han trabajado en el marco del proyecto INTEGRATE en los aspectos sociales, administrativos y legales que pueden obstaculizar el desarrollo de los Sistemas Integrados Multitróficos en Acuicultura (IMTA, por sus siglas en inglés) fortaleciendo redes de colaboración entre el ámbito científico, la empresa, y la Administración.
Ahora, fruto de ese trabajo llega el momento de poner en valor todo ese conocimiento adquirido y convertir esta innovadora forma de producir en un mismo espacio diferentes especies acuícolas de distintos niveles tróficos para convertirlos en una realidad sostenible en Europa. Y lo hacen a través de un documento en el que se desarrollan desde aspectos básicos conceptuales cómo la definición de IMTA a otros más aplicados basados en experiencias piloto llevados a cabo en diferentes áreas de Europa, el impacto medioambiental positivo de este tipo de sistemas, las acciones de comunicación que se han llevado a cabo en el marco del proyecto y los principales resultados y conclusiones obtenidos.
En este sentido, y como principales conclusiones de INTEGRATE, señala al respecto María del Mar Agraso, directora técnica del Centro Tecnológico de Acuicultura (CTAQUA) entidad coordinadora del proyecto, “destaca el desarrollo de una definición consensuada y global del IMTA para todos los sistemas, ya sea continental, marino, en mar abierto, en tierra, o recirculación, y que permitirá avanzar en el reconocimiento legal de la actividad, siendo relevante para la industria y los decisores políticos del área Atlántica”.
Para validar toda la tecnología y procesos de producción específicos, y para demostrar que los IMTA son una opción real para el futuro de la acuicultura en el área Atlántica usando especies de alto potencial productivo y valor comercial, según señalan, se han realizado ocho estudios de caso repartidos en tres acciones piloto llevadas a cabo en España, Francia, Portugal e Irlanda.
En la primera acción piloto se ha trabajado para optimizar el valor económico de las algas en los sistemas IMTA a través de la mejora de las técnicas de cultivo de 4 especies de macroalgas, una de las cuales, el alga marrón Himanthalia elongata, es nueva en acuicultura.
Mientras que, en la segunda acción, se capitalizó el “problema” que tienen los productores de ostras con la colmatación de sus bolsas de cultivo con el alga Porphyra. Se analizó la gestión de los recursos de Porphyra en un sistema de cultivo integrado con ostras y se estudió la recolección silvestre y la producción en criadero de Porphyra, con el fin de dotar a los ostricultores de una técnica de cultivo que ofrezca nuevas perspectivas económicas, nuevos insumos para la industria de las algas y nuevas técnicas de cría.
La tercera acción tuvo como finalidad poner en valor las salinas del sur de España y Portugal aprovechando sus aguas ricas en nutrientes. El trabajo realizado en esta acción piloto con dorada (Sparus aurata), ostión (Magallana gigas) y algas (Ulva sp. y Gracilaria sp) permitió un mayor desarrollo y estandarización del modelo IMTA estándar basado en tierra, con el fin de poder llevarlo a escala industrial. Los sistemas de producción en tierra son candidatos ideales para el desarrollo de IMTA debido a la posibilidad de gestionar la distribución y uso del agua.
De forma paralela, señalan, “hemos estudiado la mejora ambiental de este tipo de sistemas mediante evaluaciones del ciclo de vida”, indica Martha Dunbar. “Se ha demostrando que el cultivo IMTA en sistemas productivos semi-extensivos, normalmente realizados en las regiones suratlánticas de la península Ibérica, tiene un impacto ambiental global menor en comparación con el IMTA semi-intensivo y el monocultivo de peces semi-intensivo; siendo económicamente rentable especialmente en grandes áreas protegidas”, añade.
Todos los temas estudiados en el proyecto demuestran que el IMTA es una opción viable para el futuro en la acuicultura del Espacio Atlántico, a lo que se suma el creciente interés de la industria de la acuicultura en la diversificación de productos, y la conciencia ambiental entre consumidores y organismos reguladores.
La colaboración de todos los implicados en el sector acuícola del Área Atlántica ha sido determinante para finalizar con éxito este proyecto, y ha hecho posible llegar a un modelo productivo que refleja el compromiso del sector a la hora de planificar la acuicultura de forma sostenible. “INTEGRATE ha fortalecido aún más la comunidad internacional IMTA, mediante el desarrollo de una comunidad online y la organización de eventos que se prevé mantener para armonizar enfoques y asegurar la futura implantación de esta forma productiva a nivel europeo, apostando por la sostenibilidad”, concluye María del Mar Agraso.
El consorcio de INTEGRATE considera que sería necesario trabajar, en un futuro próximo, en la evaluación de la aplicación de estos modelos en diferentes ubicaciones, con distintas combinaciones de especies; ampliando los sistemas evaluados y cuantificando el valor productivo, económico y medioambiental. Asimismo, se hace necesario realizar un estándar técnico aplicable a las regiones Atlánticas de Europa y desarrollar un marco regulatorio global.
Sobre el proyecto
INTEGRATE (fosters cooperation for industrial transition towards Integrated Multi-Trophic Aquaculture (IMTA) in the Atlantic Area) es un proyecto financiado por FEDER a través del programa INTERREG Atlantic Area 2014-2020 coordinado por CTAQUA. Han participado en el consorcio el Instituto de investigación Agrocampus Ouest (Francia), la Asociación Escocesa de Ciencias Marinas (Reino Unido), el Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (Portugal), la Universidad Nacional de Irlanda Galway (Irlanda), Irish Seaweed Consultancy (Irlanda), ALGAplus (Portugal), y el Centro de Estudios y de Valorización de las Algas (Francia).