Los aceites ricos en omega-3 del tipo EPA y DHA de origen silvestre están escaseando en un mundo que depende de la acuicultura de especies alimentadas para seguir produciendo pescados y mariscos de alta calidad nutricional.
Una de la alternativa a esta escasez pasa por el cultivo de microalgas que son fuente natural de este tipo de lípidos gracias a su alto contenido de lípidos y proteínas altamente digestibles, ingredientes esenciales en la dieta de los peces.
Además, forman parte de un enfoque sostenible que no solo beneficia a la sociedad, la economía y el medio ambiente, sino que también reduce la huella de carbono al poder cultivarse utilizando aguas residuales.
A pesar de todas estas ventajas, existen retos científico-técnicos que limitan el cultivo a gran escala. Uno de los mayores desafíos es vencer la rigidez de la pared celular de muchas especies de microalgas que dificulta la absorción de nutrientes por parte de los organismos acuáticos monogástricos y que limitan su eficacia como alimento. Para vencer esta barrera se están experimentando métodos alternativos de ruptura de la pared celular que pueden mejorar la absorción, pero todavía deben producirse avances tecnológicos para hacerlos viables económicamente.
Una revisión científica publicada recientemente en Algal Research repasa este desafio y otros que se plantean para hacer de las microalgas un recurso alternativo en la producción de piensos para acuicultura.
La revisión también incluye una comparación de diferentes tipos de microalgas para su uso como aditivo por su contenido de nutrientes.
También se tienen en cuenta otras perspectivas, como la sostenibilidad en términos sociales, económicos y ambientales, y se abordan los desafíos que se enfrentan. Se discute el impacto del uso de microalgas como recurso principal en el medio ambiente, así como las medidas de prevención y seguimiento. Por último, pero no menos importante, este artículo de revisión también enfatiza la reutilización de microalgas provenientes de aguas residuales tratadas con microalgas, en base al concepto de la bioeconomía circular.
El cultivo, el cosechado y el procesado son costes que limitan la expansión de la industria de las microalgas. Los cultivos extensivos en estanques abiertos son mas económicos que los sistemas de fotobiorreactores cerrados. Sin embargo, existe un alto riesgo de contaminación del cultivo. El cosechado y el deshidratado encarecen el producto final, por lo que se debe seguir avanzando en mejorar la eficacia de estos procesos.
Como ingrediente, algunas especies de microalgas dan problemas de palatabilidad cuando se incluye en un alto porcentaje en los piensos para peces. Este rechazo, como establecen algunos estudios, pueden estar asociados a componentes antinutricionales con sabor amargo.
Estudiar el contenido antinutricional de diferentes especies de microalgas y emplear una mezcla con bajo contenido antinutricional podría ser la solución para mejorar la aceptación del alimento y, por ende, el consumo por parte de los organismos acuáticos. Además, se pueden explorar modificaciones en la textura del alimento o la adición de estimulantes para aumentar su aceptabilidad.
Las microalgas, señalan en sus conclusiones los investigadores, ofrecen una alternativa promisoria para la producción de alimento acuícola, pero aún hay obstáculos a superar. La investigación y el desarrollo continuo, como explican los investigadores en la revisión, son clave para optimizar la producción, mejorar la eficiencia de costos y resolver problemas de palatabilidad. El uso de microalgas en la acuicultura representa una oportunidad significativa para el futuro de la alimentación sostenible y la conservación de los recursos acuáticos.
Referencia:
Pei En Tham, Hooi Ren Lim, Kuan Shiong Khoo, Kit Wayne Chew, Yee Jiun Yap, Heli Siti Halimatul Munawaroh, Zengling Ma, Saravanan Rajendran, Lalitha Gnanasekaran, Pau Loke Show. Insights of microalgae-based aquaculture feed: A review on circular bioeconomy and perspectives. Algal Research, 2023, 103186, ISSN 2211-9264