
Las marismas de Trebujena, donde existen dos explotaciones acuícolas familiares muy conocidas en la zona, como son Piscícola de Trebujena (Pistresa) y Esteros de Manego, se han convertido desde un año en un entorno privilegiado para el anidamiento y cría de la ceceta pardilla (Marmaronetta angustirostris), el ave acuática más amenazada de Europa.
Muchas veces pasa desapercibido que acuicultura y naturaleza son compatibles. Las dos granjas de las que se hablan en este artículo han generado con su actividad la recuperación del entorno y que sean declaradas reserva natural por la Junta de Andalucía. La de Pistresa, Codo de la Esparraguera con 200 hectáreas de extensión; y la otra, igualmente recuperada desde cero, Reserva Ecológica Esteros de Manego.
A día de hoy constituyen el hogar perfecto para aumentar la población peninsular de esta ave que comenzó con la suelta de cuatro ejemplares de cerceta en 2020. Hoy en se estima que la población que existe supera los 65 ejemplares.
Este es un ejemplo más de los muchos que se pueden poner de cómo la producción piscícola permite la recuperación del entorno y aporta valor socioeconómico sostenible y compatible con los humedales.
___
Foto: Cerceta pardilla (Marmaronetta angustirostris) por Javier Sales (Sansara)