TECNOLOGÍA

El auge de los RAS: una revolución sostenible en la cría de langostinos tropicales en Europa

Europa, 16/01/2025 | Los sistemas RAS ofrecen una alimentación precisa y frecuente, optimizando el índice de conversión alimenticia (FCR) y minimizando los desperdicios

Langostino tropical Vannamei

El sistema de acuicultura en recirculación (RAS, por sus siglas en inglés) ha surgido como un método moderno e innovador para la cría de langostinos tropicales en Europa, en particular para especies como Litopenaeus vannamei. Este enfoque de vanguardia no solo aumenta los rendimientos y mejora la calidad de los langostinos, sino que también se alinea perfectamente con la tendencia global hacia una acuicultura sostenible y la protección del medio ambiente.

Si bien los sistemas tradicionales basados en estanques han sido el pilar de la cría de langostinos durante décadas, sus desafíos ambientales —como la contaminación por nutrientes debido al vertido de efluentes y el uso ineficiente de recursos—, junto con su vulnerabilidad a factores externos, han puesto de manifiesto cada vez más sus limitaciones. A medida que la industria de la acuicultura enfrenta una creciente presión para adoptar prácticas sostenibles, los sistemas RAS se presentan como una alternativa mayormente aceptada.

En Europa, la cría de langostinos tropicales en sistemas RAS también ha ganado impulso gracias a su capacidad para cumplir con estrictas regulaciones ambientales y satisfacer la demanda de los consumidores por mariscos obtenidos de manera sostenible. Países como España, Alemania, Reino Unido, Países Bajos y Dinamarca, entre otros, se han convertido en pioneros en la adopción de estos sistemas, aprovechando tecnologías avanzadas para lograr una producción constante durante todo el año.

A pesar del clima más frío en Europa, gracias al uso de RAS, la cría de langostinos tropicales puede prosperar en entornos controlados donde se gestionan con precisión parámetros como la temperatura, salinidad y calidad del agua, asegurando condiciones óptimas de crecimiento para especies que normalmente se encuentran en regiones más cálidas.

Estos sistemas también se alinean con los objetivos del Pacto Verde Europeo al minimizar el uso de agua y evitar la descarga de efluentes ricos en nutrientes en los ecosistemas naturales.

Entre sus numerosas ventajas, los sistemas RAS permiten densidades de cultivo más altas sin comprometer la salud ni el bienestar de los langostinos.

Sistemas de alimentación automática como clave del éxito

Mirafeed System /Innovaqua

Los sistemas de alimentación automática, como Mirafeed de INNOVAQUA, que distinguen a los RAS de los métodos tradicionales basados en tierra, proporcionan una alimentación precisa y frecuente, optimizando el índice de conversión alimenticia (FCR) y minimizando los desperdicios.

Estos sistemas avanzados también reducen el riesgo de sobrealimentación, un problema común en los métodos tradicionales, que puede deteriorar la calidad del agua y aumentar los costes. Este nivel de precisión tecnológica garantiza una producción constante durante todo el año y mejora la calidad del langostino, haciéndolo particularmente atractivo para los mercados Premium, donde la consistencia y la trazabilidad son fundamentales.

Estudios recientes han demostrado que alimentar a los langostinos tropicales entre seis y ocho veces al día mediante alimentadores automáticos mejora significativamente el rendimiento del crecimiento y otros parámetros fisiológicos y económicos. Los expertos identificaron ocho alimentaciones diarias como la frecuencia óptima, revelando que este régimen no solo aumentó las tasas de supervivencia, sino que también reforzó las defensas antioxidantes naturales de los langostinos, reduciendo el estrés oxidativo, un factor crítico para mantener la salud en entornos de alta densidad.

Aunque los sistemas RAS requieren una mayor inversión inicial, los ahorros operativos los convierten en una inversión sólida a largo plazo. Además, al aprovechar la automatización y los sistemas de monitoreo en tiempo real, los RAS reducen la dependencia de la mano de obra manual, simplifican las operaciones y garantizan un uso más preciso de los recursos.

Estas características no solo impulsan la rentabilidad, sino que también mejoran la resiliencia de las operaciones de cría de langostinos frente a las incertidumbres económicas y ambientales.

El cambio del sistema de cría basado en estanques a los sistemas RAS va mucho más allá de una actualización tecnológica; representa un cambio de paradigma en la forma en que se practica la acuicultura. Refleja un compromiso creciente con la responsabilidad ambiental, la eficiencia en el uso de recursos y un futuro sostenible para la producción de mariscos.

A medida que la industria global de mariscos enfrenta las presiones duales de satisfacer la creciente demanda y proteger los ecosistemas frágiles, los sistemas RAS ofrecen una solución visionaria que equilibra la productividad con la gestión ecológica.

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