Los polisacáridos sulfatados extraídos de las algas marinas poseen diversas propiedades farmacológicas que han captado un creciente interés en los últimos años debido a su potencial terapéutico. Estas propiedades incluyen actividad antioxidante, anticancerígena, antidiabética, antiinflamatoria e inmunológica entre otras.
Por esa razón, los investigadores se afanan en encontrar esos compuestos que permitirán en un futuro desarrollar nuevos tratamientos terapéuticos y fármacos eficaces para una amplia gama de enfermedades y condiciones de la salud.
Actualmente, se han identificado al menos 11.000 especies de algas marinas que contienen polisacáridos sulfatados con diversas aplicaciones farmacológicas, siendo los más prometedores los polisacáridos de Sargassum thunbergii, Gracilaria blodgettii, y Porphyra haitanensis, debido a sus potentes actividades antioxidantes, anticancerígenas y anticoagulantes.
Una revisión científica liderada por Jegadeshwari y Rajaram se ha encargado de identificarlos y caracterizarlos. Entre los descubrimientos más interesantes, se ha visto que los polisacáridos de Sargassum fusiforme son capaces de inhibir la proliferación de células leucémicas mediante la vía PI3K/AKT/BAD, tanto in vitro como in vivo. Esto subraya su potencial para el desarrollo de tratamientos específicos y efectivos contra tipos particulares de cáncer, lo que representa un avance significativo en biomedicina.
Además, los polisacáridos de Padina tetrastromatica han mostrado mejorar el proceso de cicatrización de quemaduras al reducir las reacciones inflamatorias y el estrés oxidativo. Los polisacáridos de Laminaria japonica han demostrado reducir la fibrosis pulmonar e inhibir la transición epitelio-mesénquima inducida por TGF-β a través de la vía ERK, mientras que los polisacáridos derivados de Codium fragile inducen inmunidad anticancerígena activando células asesinas naturales .
Los polisacáridos de la Ulva lactuca tienen potencial para estimular la salud intestinal y la digestión cuando se utilizan en productos lácteos fortificados como yogures prebióticos. Los polisacáridos de la Padina tetrastromatica son efectivos para la protección del corazón al mejorar la hiperlipidemia, la disfunsión endotelial y la inflamación en modelos experimentales de infarto de miocardio inducido.
Por su parte, los polisacáridos de Hypnea musciformis, han mostrado potencial anticancerígeno, antimicrobiano y neuroprotector, subrayando la utilidad en diversas aplicaciones biomédicas.
Todos estos ejemplos ilustran la amplia gama de aplicaciones de los polisacáridos de las algas y la importancia de seguir avanzando científica y técnicamente.
Referencia:
Jegadeshwari, B., & Rajaram, R. (2024). A critical review on pharmacological properties of sulfated polysaccharides from marine macroalgae. Carbohydrate Polymers, 344, 122488
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