Todo el trabajo expuesto durante los días del Congreso sirve para conocer en qué están trabajando buena parte de la academia de nuestro país y como una llamada de atención para seguir explorando el potencial de la ciencia, la tecnología y las innovaciones sostenibles en la acuicultura.
Aunque no toda la ciencia en acuicultura que se está desarrollando acude a este llamado a la colaboración y la participación, si es interesante comprobar hacia donde se dirige el esfuerzo investigador. En este XIX CNA han destacado algunos estudios presentados que exploran mejoras en el estado larvario de especies de interés para la acuicultura española, así como de nuevas especies con potencial. También, y cada vez con mayor presencia, se han abordado innovaciones nutricionales para la bioconversión de residuos agroalimentarios a través de los insectos o el uso de tecnologías digitales que prometen transformar la industria acuícola hacia prácticas más verdes y económicas.
De dorada y lubina, dos especies tradicionales de nuestra acuicultura, se presentaron estudios sobre el uso de harinas alternativas de insecto, la suplementación de los piensos con microalgas y antioxidantes, o el bienestar y la respuesta al estrés.
Sobre trucha arcoíris, una que quizá merezca mayor atención por parte de la academia de la que tiene en la actualidad, destacaron los estudios con inclusión de microalgas en los piensos y la respuesta al estrés y bienestar.
Llama la atención también como se han incrementado los estudios con especies de gran potencial como la seriola. Estos días hemos podido descubrir los resultados de estudios realizados con dietas de destete y co-productos de la pesca. También avances en la zootecnia con resultados que establecen una densidad óptima de cultivo.
De pulpo común se estudió la actividad enzimática y el estado oxidativo durante la digestión; así como otros relacionados con la respuesta inmune.
Como se ha visto, el objetivo de los estudios va más allá del mero aprovechamiento de los co-productos agrarios. Se busca dar con ingredientes que sean nutritivos para los peces y que tengan un buen rendimiento en el proceso de fabricación. Los insectos, dentro de esta área temática son tendencia y ya se va viendo cada vez más claro el papel que tendrán en un futuro.
Estas harinas no solo deben ser sostenibles y nutritivas, también deben ser económicamente viables, ofreciendo una alternativa rentable a los métodos convencionales de alimentación en acuicultura.
De los co-productos de la pesca se han puesto en valor péptidos bioactivos que desmuestran el gran potencial de la aplicación de los principios de economía circular.
El bienestar animal ha sido un tema central de este Congreso y reflejo de una tendencia como hace unos años fue la sostenibilidad ambiental de la actividad. Esta área temática se ha abordado desde distintos enfoques que destacan la importancia de considerar el bienestar animal no solo por razones éticas, también para optimizar la salud y productividad de los cultivos.
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