En los océanos del mundo existen 300 especies de calamares conocidas que desgraciadamente en su mayoría se encuentran bajo presión pesquera y contaminación estimándose que sus poblaciones están al 10% de su potencial.
Los calamares son productos del mar altamente nutritivos y saludables con un alto contenido de proteína de alto valor y bajo en grasas. Para revertir de declive de este recurso alimentario tan importante lo recomendable es recurrir a la acuicultura.
Por eso, investigadores de la Unidad Física y Biológica del Instituto de Ciencias y Tecnología de Okinawa han desarrollado el primer sistema de acuicultura con potencial para ser comercializado.
Según describen los autores de este trabajo, los calamares son animales muy difíciles de cultivar, tanto por su comportamiento agresivo, como por su sensibilidad a las corrientes de agua, preferencia por determinado tipo de alimento y complejo ciclo de vida.
El sistema de acuicultura está adaptado para el cultivo de tres especies de calamar llamado ovalado, de las cuales en Japón existen dos especies.
El profesor Zdenek Lajbner, responsable del cultivo de los calamares en el Instituto japonés explica que contrariamente a lo que piensa mucha gente la acuicultura es una actividad complicada y, en determinadas especies, como el atún o la anguila, se llevan años investigando y todavía no han sido domesticadas.
El éxito de cerrar el ciclo del calamar no es la parte más importante, sino más bien el poder crear un sistema para cultivar calamares con capacidad para ser comercializado.
Como explica el investigador Ryuta Nakajima, para conseguir este avance han sido necesarios aplicar conocimientos de distintas disciplinas de acuicultura.
Los investigadores ahora están trabajando en estrecha colaboración con la Oficina de Desarrollo e Innovación Tecnológica del Instituto para reunirse con empresas que puedan estar interesadas en comercializar el prototipo.