
La industria de ingredientes marinos está realizando un importante esfuerzo para recuperar las cabezas, vísceras, pieles y otros restos generados durante el transformado del pescado.
Estos subproductos, según explica Enrico Bachis, Director de Investigador de Mercados de IFFO, representan entre el 30% y el 70% del peso húmedo de algunas especies, y son consideradas materia prima valiosa para la producción de harina y aceite de pescado.
Poco a poco esta materia prima se ha ido incorporando en los procesos de producción de ingredientes marinos y ya genera el 34% de la harina de pescado y el 54% del aceite de pescado global, según datos de 2022.
Estas cifras, como destaca Enrico Bachis, resaltan la importancia y el crecimiento significativo del uso de estos subproductos de pescado y lo valiosos que son para la fabricación de piensos. Y lo que también es importante, contribuyen a reducir los desperdicios a través de la generación de productos valiosos y nutritivos.
Los subproductos son generados por la industria transformadora tanto de especies de carne blanca como el abadejo, el bacalao, la merluza, la eglifina, entre otras; como de especies pelágicas como el arenque y la caballa. Igualmente, especies como el salmón de acuicultura, el atún, el panga o la tilapia, son fuentes de ingredientes marinos circulares.
Si bien se trata de una noticia prometedora que pone de manifiesto los grandes avances de la industria, como señala el experto, todavía existe una gran proporción de subproductos de pescado para consumo humano que no se aprovecha eficientemente en productos de alto valor nutricional.
Como indica Enrico Bachis, el desarrollo y la optimización de la recolección y el procesamiento de esta valiosa fuente de materia prima deben ser alentados tanto como sea posible para aprovechar al máximo los recursos de los que disponemos y promover la sostenibilidad de la industria alimentaria.