
La Comisión Europea mantiene la salvaguardia a las importaciones de moluscos bivalvos procedentes de Turquía destinados a consumo humano al no cumplir con las normas microbiológicas de la Unión Europea.
Esta medida se viene prorrogando desde que en 2013 las auditorías de la Comisión detectaron deficiencias microbiológicas de los moluscos bivalvos originarios de Turquía. Posteriormente, en septiembre de 2015, se constató que seguían existiendo “deficiencias significativas” en el sistema de control de los bivalvos destinados a la Unión Europea.
Ya en enero de 2020, las autoridades competentes turcas presentaron información sobre las medidas correctoras puestas en marcha que no han podido ser evaluadas sobre el terreno debido a las restricciones impuestas por la pandemia de COVID-19.
Con motivo de que el reglamento 743/2013 expiró el 31 de diciembre de 2021. La Comisión ha publicado un reglamento nuevo, el 2022/478 por el que mantiene la salvaguardia.
Si no hay cambios este reglamento estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2023.