El próximo lunes 13 de junio la ciudad noruega de Stavanger acoge la Conferencia internacional bienal de acuicultura, AquaVision 2022, que tendrá al Premio Nobel, el economista Joseph Stiglitz como orador principal.
Este año se celebra la 14 edición y será de nuevo presencial después del parón surgido en 2020 por motivo de la Covid-19. La organización espera la participación de unos 450 conferenciantes procedentes de más de 40 países.
AquaVision está organizada por Skretting y su empresa matriz Nutreco desde 1996. La Conferencia reúne a líderes y responsables de la toma de decisiones de todo el mundo. En esta conferencia empresarial bianual sobre acuicultura, los debates se centran en los retos y oportunidades del sector.
Joseph Stiglitz recibió el premio Nobel de Economía por sus análisis de los mercados con información asimétrica. Fue uno de los principales autores del Informe de 1995 del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que compartió el Premio Nobel de la Paz de 2007. En 2011 TIME nombró al profesor Stiglitz una de las 100 personas más influyentes del mundo.
El profesor Stiglitz fue economista jefe y vicepresidente senior del Banco Mundial entre 1997 y 2000. En los últimos 15 años ha escrito una serie de libros que han tenido una enorme influencia en la configuración de los debates mundiales. Entre sus galardones se encuentran más de 40 doctorados honoríficos, incluidos los de las universidades de Cambridge y Oxford.
La conferencia llega en un momento cargado de incertidumbre por la invasión rusa de Ucrania y la inflación que afecta la economía mundial y muy especialmente a las materias primas y las energías.
Los distintos actores de toda la cadena de valor de productos del mar tendrán la oportunidad de inspirarse y encontrar de forma conjunta soluciones a todos los problemas que acechan a la acuicultura a corto plazo.
A largo plazo nos enfrentamos a un contexto mundial de superpoblación que alcanzará los 10 000 millones de personas en 2050, y cambio climático.
En un mundo globalizado el sector está experimentando una gran transformación, tanto de uso de materias primas como de tecnologías disruptivas, en el que la inteligencia artificial se abre paso para mejorar los cultivos y el bienestar de los peces.