Aquasoja, marca comercial de piensos de acuicultura de Sorgal ha lanzado y desarrollado en los últimos años alimentos completos para especies marinas como la corvina roja (Sciaenops ocellatus) y el rodaballo (Scophthalmus maximus) que, en comparación con las “clásicas” doradas y lubinas, se consideran “más exigentes en cuanto a la aceptación de ingredientes, o para los que faltan datos y experiencia en materia de nutrición y alimentación”.
Esto hace, según señalan en Aquasoja, que los piensos comerciales disponibles para estas especies – incluidos los suyos - sean “muy conservadores”. Es decir, estén formulados en base a los ingredientes marinos, complementados con otros de origen vegetal bien conocidos. El objetivo es simple y busca, imitar los hábitos alimenticios de los especímenes silvestres, con recetas de dietas seguras, no disruptivas, nutritivas y sabrosas.
Sin embargo, estas fórmulas deben ser optimizadas en cuestión de costes, siempre y cuando mantengan los niveles de calidad nutricional. Sobre todo, como señalan en un contexto actual de alza de costes derivados de la coyuntura mundial post-pandémica y con el conflicto bélico ruso-ucraniano, y ante la posibilidad puntual de ruptura de la cadena de suministro de determinadas materias primas.
En este sentido, en Aquasoja apelan a tener en cuenta su experiencia con los co-productos avícolas producidos para peces marinos en forma de harinas a partir de restos no destinados a consumo humano directo, plumas hidrolizadas, o harina de sangre de aves. En este campo, como destacan, contamos con “muchos datos científicos y experiencia” en su uso en dorada, lubina, trucha arcoíris, corvina y otras especies.
La valorización de co-productos de aves forma parte del negocio de Soja de Portugal, lo que confiere una ventaja competitiva a Aquasoja de tener acceso a co-productos avícolas debidamente trazados y valorizados localmente, y que permite “un mejor control sobre la trazabilidad, calidad y frescura de estas materias primas, así como una huella de carbono reducida.
En este sentido recuerdan y ponen de ejemplo cómo hace unos años, Aquasoja obtuvo muy buenos resultados incorporando co-productos avícolas en piensos de seriola (Seriola dumerili). Primero, en ensayos con juveniles de seriola en pruebas realizadas en el Centro Tecnológico de Acuicultura de Andalucía (CTAQUA), en España. En estas pruebas se evidenció la buena aceptación de los ingredientes que condujeron a “resultados de rendimiento de crecimiento similares o incluso mejores en comparación con las dietas de origen marino”.
Posteriormente, añaden, estos buenos resultados, añaden, siguieron con la seriola criados en condiciones comerciales. Es por eso que el pienso para seriola de Aquasoja se considera innovador, al incluir co-productos avícolas de alta calidad en su fórmula.
Este ejemplo de la seriola es importante para destacar la necesidad de seguir avanzando en el conocimiento sobre nutrición y alimentación, e ir mejorando las actuales dietas tradicionalmente más conservadoras que hacen un uso elevado de ingredientes marinos.
Para la corvina roja y rodaballo la historia podría ser similar ya que, existe una experiencia “muy positiva” con estas especies. Esto ha permitido, según señalan, “operaciones acuícolas más sostenibles económica y ambientalmente”.
Actualmente, como señalan desde Aquasoja, los piensos para corvina roja y rodaballo incluyen proteína animal procesada, que se complementa con harina de pescado y otros ingredientes ricos en proteínas marinas.
Nuestra experiencia, añaden desde Aquasoja, nos demuestra que el uso de productos avícolas es posible “en varias especies marinas carnívoras, complementando la harina de pescado en la entrega de proteína de alto valor biológico para el crecimiento muscular deseado de los peces”. “Creemos que el secreto está en la calidad nutricional de los productos avícolas siguiendo metodologías de procesado industrial correctas y controladas”.
En la actual búsqueda tan dinámica y acelerada de fuentes proteicas complementarias y sostenibles a la harina de pescado, AQUASOJA tiene el privilegio de poder incluir coproductos avícolas en sus recetas desde 2013.