De un tiempo a esta parte se ha observado una pérdida de productividad de los parques marisqueros de Galicia. La razón aún es incierta, aunque los indicios apuntan a tres factores predominantes: contaminación, especies invasoras y cambio climático.
El sector marisquero está compuesto principalmente por mujeres, y estas, urgen a tomar medidas y a que la administración, las cofradías y las universidades se sienten y busquen soluciones en común.
La catedrática de Zoología en la Facultad de Ciencias del Mar en la Universidad de Vigo, Elsa Vázquez Otero lleva una vida dedicada a descifrar los factores que pueden explicar esta pérdida de productividad. En sus estudios han observado que la baja salinidad del mar y el calentamiento de la arena por efecto de episodios de lluvias torrenciales y olas de calor pueden explicar lo que está sucediendo.
Según explican desde la Universidad, las inusuales lluvias torrenciales que los últimos años han estado afectando Galicia hacen bajar de manera brusca la salinidad hasta un 60%.
Por su parte desde la Xunta de Galicia se relativiza la caída de la producción por zonas. La mala situación de unas zonas se compensa con otras que están mejor. Según las estadísticas oficiales, el año pasado se vendieron en las lonjas gallegas más de 7 000 toneladas de moluscos bivalvos, una cifra solo levemente inferior a las 8 000 toneladas de 2014.
En las zonas de las rías de Ferrol y Arousa que son las que están peor se trabaja intensamente para impulsar su productividad. Mientras que en otras, como Muros, Noia y Pontevedra, están dando buenos resultados.