
Un equipo de investigadores del Centro Interdisciplinar de Investigación Marina y Ambiental de la Universidad de Oporto (CIIMAR-UP) y del Centro de Ingeniería Biológica de la Universidad de Minho han presentado una patente internacional sobre el reciclaje de nutrientes agroalimentarios para uso en acuicultura.
Se trata, como explican desde la Universidad de Oporto, de un avance biotecnológico que permite crear una nueva línea de investigación en el CIIMAR para la nutrición y mejora de la calidad de los peces de acuicultura.
El avance biotecnológico se ha llevado a cabo en el marco del proyecto SPO3, liderado por el CIIMAR en el que también participa la Universidad de Minho.
En concreto, lo que han conseguido los investigadores portugueses es valorizar subproductos agroindustriales derivados de la producción de vino, aceite y cerveza que son sometidos a la tecnología de fermentación en estado sólido, la cual requiere un bajo consumo de agua y energía, para producir ingredientes de alto valor nutricional con características funcionales en los peces, garantizando la calidad y seguridad del producto que llega al consumidor.
Estos ingredientes permiten, a su vez, reducir la dependencia de materias primas tradicionales como la harina y aceite de pescado.
Helena Peres, investigadora principal del proyecto SPO3 destacó que esta tecnología permite desarrollar piensos para acuicultura más sostenibles “aplicando procesos biotecnológicos como la fermentación en estado sólido, para transformar subproductos locales, de bajo valor nutricional, en innovadores ingredientes, de valor añadido”.
Estos nutrientes, destacó, “contienen ácidos grasos Omega-3 de cadena larga y compuestos funcionales”. Los productos de fermentación usados como ingredientes, añade, “podrán sustituir a los ingredientes agrícolas comúnmente utilizados en los piensos, como el trigo, el maíz o la soja, reduciendo la competencia de estos con la alimentación humana directa y promoviendo la fabricación de piensos con menor huella de carbono, más sostenibles y competitivos”.
Isabel Belo, investigadora responsable del proyecto SPO3 por parte del Centro de Ingeniería Biológica de la Universidad de Minho destacó que esta biotecnología permite producir, por tanto, extractos funcionales como compuestos bioactivos, así como enzimas, ácidos grasos poliinsaturados y antioxidantes, y omega-3 “que pueden ser incluidos como suplementos en dietas de base vegetal para peces”.
La fermentación permite la mejor digestibilidad de los nutrientes, optimizando el estrés oxidativo entre otras ventajas. Además, indicó, “es posible criar peces de alta calidad y adaptados a las necesidades nutricionales humanas”.
Parte de los trabajos desarrollados en esta investigación ya fueron publicados en misPeces. Puede obtener más información en los enlaces de abajo.