Descarga de concha de abanico en Bahía de Sechura | SANIPES
El Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (Sanipes), dependiente del Ministerio peruano de la Producción, llevará a cabo una revaluación de las áreas de producción de la zona 012 de la Bahía de Sechura, en el norte del país, que implica la participación de 240 asociaciones locales de productores de concha de abanico y alrededor 2 500 maricultores.
El objetivo de esta acción es la de garantizar la inocuidad de las conchas de abanico que, principalmente se destinan a la exportación, principalmente a Europa, y también a Estados Unidos y Asia.
El especialista pesquero de la “Asociación de Maricultores de la bahía de Sechura”, José Aldana, destaca que las actividades de fiscalización en las 9 áreas de producción de conchas de abanico ubicadas en la bahía de Sechura, “fortalecen las buenas prácticas de inocuidad y seguridad alimentaria de dichas actividades productivas”.
Este tipo de estudio denominado “revaluación sanitaria” por SANIPES, se debe realizar cada seis años, y en el caso de esta zona litoral piurana dicho estudio ayudará a verificar si las áreas modificaron o mantienen su calidad sanitaria; y así los productores de moluscos bivalvos puedan continuar exportando sin sobresaltos, a distintos mercados internacionales como la Unión Europea.
El especialista, hizo hincapié en la importancia que tiene la actividad acuícola en la región Piura, con una representación del 80% de la producción nacional de conchas de abanico exportadas hacia el mercado europeo principalmente.
“Ya estamos cerca a culminar con la revaluación sanitaria, esperamos con mucho optimismo tener los resultados pronto y obtener la clasificación sanitaria que nos faculte a seguir ingresando a las más importantes economías del mundo e incursionar en otras”, señaló Aldana.
La denominada “revaluación sanitaria” viene recogida en el Decreto Supremo N.° 004-2018-PRODUCE, que modifica la Norma Sanitaria de Moluscos Bivalvos Vivos, aprobada por Decreto Supremo N.° 07-2004-PRODUCE, se estableció la revaluación sanitaria de las áreas de producción clasificadas.
En este proceso que dura 14 meses, se están realizando estudios para identificar las posibles fuentes de contaminación que podrían impactar en áreas de producción, así como también, la condición sanitaria del agua de mar y de los moluscos bivalvos vivos.
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