La investigadora del Instituto Universitario de Acuicultura y Ecosistemas Marinos Sostenibles (IU-ECOAQUA) de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) Gerence Courtois de Viçose ha presentado en Oporto los avances de un estudio de Acuicultura Multitrófica Integrada (IMTA, por sus siglas en inglés) de especies como el abalón u oreja de mar, el pepino de mar, o las macroalgas, entre otras.
En este estudio han participado también centros de investigación y empresas del sector procedentes de Francia, Sudáfrica y España.
Más específicamente, el trabajo de la investigadora de IU-ECOAQUA se ha centrado en el desarrollo de la producción de pepinos de mar y de oreja de mar de manera conjunta, así como la integración del cultivo de macroalgas para la alimentación e incrementar la sostenibilidad de las dietas de estos invertebrados.
La oreja de mar, como señaló al respecto Courtois de Viçose, se puede cultivar junto a otras especies, tanto en alta mar como en tanques de tierra, “por lo que el coste de infraestructuras en empresas acuícolas podría reducirse bastante”. Algo, como puntualiza, “que puede favorecer altamente su producción”.
Como señalan desde el IU-ECOAQUA, el estudio se enmarca en el proyecto europeo AquaVitae donde la mayoría de socios han compartido y debatido sobre los progresos en los principales resultados de sus respectivas investigaciones sobre la producción acuícola de especies de ‘bajo nivel trófico’, a través de la optimización de los sistemas y procesos.
A este respecto, como señalan, la acuicultura de bajo nivel trófico se enfrenta a retos similares en todo el océano Atlántico para desarrollar sistemas de producción.
Sobre el encuentro en Oporto de AquaVitae:
La reunión, la primera presencial desde que comenzó la pandemia, tuvo lugar entre el 26 y 28 de abril en Oporto y contó con la participación de 70 investigadores y representantes de empresas del sector que presentaron sus avances en las áreas claves que participan.
Este proyecto está financiado por el Horizonte 2020 y está representado por 35 socios de la cuenca atlántica: Europa, América (Norte y Sur), Namibia y Sudáfrica pertenecen al consorcio.
Los investigadores y socios de la industria discutieron los resultados de su amplia colaboración en el Atlántico.
El proyecto busca lograr más de 130 resultados clave con la colaboración de la industria, distintos centros de investigación y los organismos gubernamentales. El proyecto cuenta con 13 casos de estudio repartidos por distintos puntos del Atlántico, divididos en cinco cadenas de valor, que incluyen: macroalgas, equinodermos, moluscos, bivalvos y crustáceos.
El proyecto apoya y contribuye a la aplicación de las Declaraciones de Belém y Galway para la colaboración internacional en materia de investigación en el océano Atlántico.
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